
Este martes se cumplen seis meses desde que AmRest –más conocida por ser la propietaria de la cadena de restaurantes La Tagliatella– debutó en la bolsa española a través de un listing procedente de la bolsa polaca. Su debut, a 8,76 euros, arroja ganancias del 2,7% para quien hubiera comprado el 21 de noviembre, una sesión en la que la firma de restauración no cruzó una sola acción, en lo que fue la precuela de su posterior historia en el mercado nacional, siguiendo los pasos de otros listing: escasa liquidez y baja negociación en su segundo mercado. En aquella sesión, quedaron hasta 9.000 órdenes de compra a la espera de encontrar vendedor.
La propietaria de franquicias como KFC, Starbucks o SushiShop es la tercera compañía de todo el mercado nacional que más tiempo necesitaría en caso de querer rotar toda su capitalización. La primera de ellas, la embotelladora de Coca-Cola (Coca-Cola European Partners), también es un listing y, entre ambos, se cuela Airbus, cuyo mercado principal es el francés.
Según Bloomberg, AmRest negoció los últimos tres meses un volumen medio diario de 17.289 euros, lo que implica que, sobre un valor de mercado de unos 1.930 millones de euros, necesita 462 años para poder rotar el 100% de su capital. Fuentes próximas a la compañía aseguran que "están estudiando medidas" con el objetivo de incrementar la liquidez, aunque no mencionan si se refieren a aumentar el free float (capital libre) a través de la venta de parte del 67% de la firma en manos de Carlos Fernández –Finacess–. Y, aunque el grueso de los inversores siguen estando en Polonia, AmRest cuenta con un centenar de accionistas de relevancia en España.
Coca-Cola European Partners es la firma que menos negocia en relación a lo que capitaliza. La compañía que preside Sol Daurella tendría que esperar a inaugurar el nuevo siglo, en el año 3001, para lograr dar la vuelta a sus casi 24.000 millones de euros de capitalización.
Caídas en el año
AmRest es la duodécima compañía de todo el Mercado Continuo más castigada en lo que va de año. La compañía pierde un 9,73% en 2019 y hasta un 18% desde los máximos que marcó en marzo, en los 11,6 euros. La presentación hace quince días de sus resultados trimestrales fueron el punto de inflexión. AmRest reconoció una caída del beneficio del 15% respecto al mismo periodo de 2018, al ganar 3,8 millones de euros.
El consenso de mercado ha rebajado hasta un 6,1% su previsión de beneficio para 2019 respecto a la previsión que manejaba antes de la presentación de resultados. Estima unas ganancias de 63 millones de euros este ejercicio. También ha recortado sus previsiones de cara a 2020 en casi un 5%, hasta los 81 millones de euros; y, de cara a 2021, se espera que alcance los 111 millones de euros. Aun con todo, AmRest ostenta una de las mejores recomendaciones de compra del sector, por delante de firmas como McDonald's o Domino's.
