
Las nuevas medidas arancelarias aprobadas por la Unión Europea el pasado mes de febrero sobre las exportaciones de acero de países como China ya han comenzado a notarse en el mercado comunitario.
Durante los dos primeros meses del año, las importaciones de acero chino en Europa cayeron un 21%, por encima de la previsión que maneja Acerinox de una caída del 15% a cierre del año, lo que reducirá hasta el 25% su cuota de mercado a finales de 2019, según reveló ayer en una charla con periodistas Bernardo Velázquez, consejero delegado de Acerinox. En 2018, sólo China alcanzó un máximo histórico del 30 por ciento del mercado europeo. Velázquez cree que una "cuota del 20 por ciento" es "razonable" en el medio plazo.
Como consecuencia de los aranceles impuestos por EEUU entre marzo –en un primer anuncio– y julio del año pasado, "se adelantaron las exportaciones de acero hacia la Unión Europea" en ese periodo, provocando una auténtica avalancha de producto, lo que perjudicó seriamente al sector acerero del Viejo Continente, sobre todo, en el último trimestre de 2018. "Causó un gran desorden. Llegó material a Europa sin siquiera haberlo vendido previamente", afirma Velázquez.
Esta situación provocó caídas en la acción de Acerinox del 33% de octubre a diciembre, hasta tocar un mínimo en los 8,3 euros. "En el cuarto trimestre el impacto (de la avalancha de importaciones chinas) fue tremendo. Prácticamente en Europa se paró el consumo de acero inoxidable", reconoce Rafael Miranda, presidente de la compañía.
En lo que va de año, la acerera remonta un 7 por ciento, hasta los 9,25 euros, sin perder de vista la desaceleración económica a nivel mundial.
Perspectivas
"Los mercados están muy cautos. Nadie quiere incrementar demasiado su deuda ni tampoco las existencias, pero, de momento, todo funciona con normalidad", apunta Velázquez. Acerinox espera cerrar el primer trimestre del año con un beneficio operativo superior al cuarto trimestre de 2018, cuando fue de 58 millones de euros, la mitad que un año antes.
La compañía asegura que 2019 irá de menos a más, con una recuperación mucho más evidente a partir del segundo semestre. El consenso de mercado prevé una caída del beneficio neto de Acerinox del 12% para este ejercicio, hasta los 208 millones, y recuperar los 230 millones ya en 2020.