
Hoy se cumple el primer aniversario del regreso a bolsa de Metrovacesa. Un cumpleaños amargo teniendo en cuenta que la promotora capitaneada por Jorge Pérez de Leza ha perdido alrededor de 842 millones de euros de valor bursátil después de que la cotización de sus títulos se haya desplomado un 36,4% desde entonces.
La compañía, que debutó un día más tarde de lo previsto en una semana negra para el mercado con serias dudas sobre su cartera de activos -compuesta por suelos de primer nivel pero también por otros de segunda categoría-, tuvo que bajar su precio inicial a 16,5 euros por acción por la escasez de demanda y no ha sido capaz de remontar el vuelo.
La caída acumulada en los últimos doce meses, hasta los 10,49 euros a los que cerró ayer, le ha llevado a cotizar con un descuento sobre el valor neto de sus activos (NAV, en sus siglas en inglés) del 41%, el mayor entre sus comparables, un 21% en el caso de Neinor, y un 27% en el de Aedas.
Un año después la firma sigue sin convencer ni a los inversores en general -se coloca entre el peor estreno bursátil desde 2017, seguida de Parques Reunidos-, ni a los analistas en particular, que le otorgan una recomendación de mantener, si bien es verdad que ha mejorado en las últimas semanas.
Por otra parte, el consenso de mercado que recoge FactSet sitúa su precio objetivo en los 14,65 euros, lo que le otorga un potencial al alza del 39%, lo que implica valorar a la promotora un 11% por debajo de su salida a bolsa, algo que no sucede ni con Neinor ni con Aedas, con sendos recorridos al alza del 44% y 48%, respectivamente.
Por si fuera poco la compañía también ha sufrido el enfriamiento de las estimaciones para el sector inmobiliario nacional desde mediados de año. Metrovacesa reconoció el pasado mes de agosto una rebaja de sus previsiones en cuanto a la entrega de viviendas en 2020 y 2021, aunque a un precio superior, con lo que niega que vaya a tener un impacto negativo en sus beneficios.
Así, si se cumplen las previsiones, la firma -presenta resultados el 28 de febrero- cerrará 2018 con mínimas ganancias de 1 millón de euros, 3 millones en 2019 y no alcanzará los 100 millones hasta 2020.