
Vuelta a empezar tras el tercer intento frustrado. Los inversores europeos optaron este viernes por recoger beneficios después de tres sesiones de subidas después de que se conocieran unos malos datos macroeconómicos en China y de PMI en la eurozona -en el nivel más bajo de los últimos cuatro años-, lo que dejó el balance semanal en los parqués del Viejo Continente en una subida en torno a un 1%.
A pesar de que el acercamiento de posturas entre Italia y Bruselas por el objetivo de déficit presupuestario y de que el BCE confirmara que pese al final del programa de compras de deuda el banco central continuará sirviendo de apoyo insufló algo de optimismo en las bolsas, lo cierto es que sigue latente el temor ante la desacelaración del crecimiento económico, los dimes y diretes de la guerra comercial entre EEUU y China y el clima de hartazgo por el Brexit. Si bien Theresa May sobrevivió el miércoles a la moción de confianza en el seno de su partido, la salida de Reino Unido de la UE seguirá siendo un factor de riesgo.
Por otra parte, los mercados aún no muestran estrés pero sí una preocupación creciente ante el escenario de incertidumbre que vive Francia, donde el movimiento de los chalecos amarillos obligó al Gobierno de Macron a enfrentar una moción de censura. La prima de riesgo gala llegó a repuntar casi 10 puntos básicos desde inicios de diciembre, alcanzando máximos cercanos a los 50 enteros el miércoles -niveles que no se veían desde las jornadas previas a la derrota de Le Pen en las elecciones presidenciales de 21017-.
Aunque las alzas sirven para poner distancia frente a los mínimos anuales que Europa perdió la semana anterior, los índices no fueron capaces de formar un rebote sostenible. Desde el lunes, el EuroStoxx y el Ftse 100 subieron cerca de un 1%, el Mibtel sumó un 0,9%, mientras que el Ibex y el Cac avanzaron un 0,8%, y el Dax, un 0,7%.
EEUU, a un 3% de mínimos
El contexto en Wall Street, el mercado director, tampoco acompaña. A media sesión del viernes y con Johnson&Johnson cayendo un 10 % por las informaciones que apuntan a que sabía de la existencia de amianto en su talco, los principales índices cedían en la semana un 1% y se quedan, en el caso del S&P 500 y el Dow Jones, a un 3% del soporte urbi et orbi -los mínimos intradía del año que se encuentran en los 2.930,75 y 26.828,39 puntos, respectivamente- y potencial zona de compra para los expertos de Ecotrader.
"El siguiente paso que haría ganar enteros a la posibilidad de asistir a un rebote sostenible en Europa más allá de un par de sesiones es que al otro lado del Atlántico los principales índices logren batir resistencias análogas que también encuentran en los máximos del 7 de diciembre", recuerda Joan Cabrero, director de estrategia del portal de ideas de inversión. El Dow Jones debería batir los 25.095 puntos y el S&P los 2.708 puntos.El Nasdaq es el que más cerca se encuentra, ya que tiene su resistencia en los 6.850 puntos.
De vuelta a España, las eléctricas hicieron gala de su carácter defensivo y protagonizaron las mayores alzas. Iberdrola, Enagás, Naturgy y Endesa se anotaron subidas superiores a un 4%. El revulsivo para los títulos de la firma que preside Sánchez Galán -rebotó un 6,6%-se produjo después de que Bank of America elevara su recomendación a comprar. Dia cayó un 9% en la semana en que se comunicó que abandonará el Ibex el 24 de diciembre -le sustituirá Ence- y de que anunciase una ampliación de capital por valor de 600 millones de euros.