China ha impuesto una multa récord por manipulación del mercado: 5.500 millones de yuanes, más de 700 millones de euros. Una cifra enorme que supone además casi seis veces el beneficio estimado que obtuvo Xiamen Beidabao Group por sus operaciones irregulares en el mercado de Shenzhen, el segundo en importancia del gigante asiático.
En concreto, el regulador chino acusa a Xiamen de haber manipulado los precios de Jiangsu Zhangjiagang Rural Commercial Bank, Jiangsu Jiangyin Rural Commercial Bank y Guangdong Hoshion Aluminium, según recoge la agencia Bloomberg. Xiamen habría estado dos meses realizando operaciones ilegales para su propio beneficio.
La multa es una nueva muestra de los esfuerzos de China para acabar con las irregularidades en su mercado de valores, que pese a ser el segundo mayor del mundo tiene una alta dosis de amateurismo, con los inversores individuales teniendo un gran peso en él.
Liu Shiyu, presidente del regulador, advirtió en febrero del año pasado que perseguiría los delitos y malas prácticas en los mercados sin importar cuándo se hubieran realizado.
A pesar de la enorme cuantía de la multa, la severidad del castigo no es nuevo. En diciembre, un trader fue sancionado con 54 millones de yuanes (casi 7 millones de euros) por manipular 15 valores, obteniendo un beneficio de 27 millones de yuanes, es decir, exactamente la mitad. Es más, incluso otro trader recibió una multa de 1 millón de yuanes (130.000 euros) a pesar de que sus intentos de manipulación le provocaron pérdidas.
A principios del año pasado, el regulador impulsó otras dos megamultas de 1.170 millones y 3.470 millones de yuanes, añadiendo prohibiciones de por vida para operar en el mercado.