Ya advertíamos la semana pasada que a la mínima que Wall Street flaqueara en sus fuerzas las bolsas europeas podían volver a sufrir. Para que se alejara el riesgo de asistir a una vuelta a la zona de mínimos del año y origen del último rebote señalábamos que era preciso que las subidas llevaran a los índices a cerrar el hueco que abrieron a la baja el 6 de febrero, tal como era los 3.478 puntos del Eurostoxx 50. Pues bien, el alcance de ese hueco bajista ha actuado a la perfección como resistencia y desde el mismo las ventas han vuelto a imponerse, provocando lo que calificamos que podría ser un último susto bajista, previo a una próxima reacción alcista fuerte y sostenible en el tiempo.
Este latigazo bajista ha llevado al Dax 30 a alcanzar la zona de soporte crítica que representan los mínimos que marcó en agosto del año pasado en los 11.870 puntos. El alcance de este soporte fundamental, que no nos sorprendería que pudiera llegar a ser cedido temporalmente, lo vemos a priori como una inmejorable oportunidad para aquellos que tengan una exposición baja a bolsa para comprar.
No descartamos que podamos ver una dilatación de soportes antes de ver un reversal en toda regla, por lo que recomendamos no dejarse llevar por el miedo y un eventual pánico, esperando a un cierre semanal por debajo de soportes como son los 3.300 del EuroStoxx 50 o los 11.870 del Dax, antes de vender bolsa. Esto es así en la medida que el Eurostoxx, el Cac o el FTSE Mib, todavía tienen cierto margen de caída hasta alcanzar soportes.
