
La compañía dueña de la famosa aplicación para móviles Snapchat ha informado que en 2017 cerró con unas pérdidas de 3.445 millones de dólares, pero las acciones suben más de un 35%. Los inversores premian que, por primera vez desde que salió a bolsa, la aplicación aumenta el número de usuarios activos. Pese al espectacular rebote del 36% a 19 dólares por acción en máximos de ocho meses, los títulos de Snap todavía pierden un 23% desde su salida a bolsa el pasado mes de marzo.
La compañía afirma que las abultadas pérdidas en las cuentas de 2017 se deben a los costes asociados a la compensación económica para sus empleados por la salida a bolsa, con lo que los números rojos operativos son de 845 millones de dólares. Pero el verdadero motivo de las subidas en bolsa es el aumento de usuarios activos en la aplicación, que debería traducirse en mayores ingresos por publicidad.
Los usuarios activos diarios aumentaron un 18% hasta los 187 millones a cierre de diciembre. "Con algunas mejoras en el crecimiento del usuario y una mayor automatización de las ventas de anuncios, creemos que la empresa está avanzando lentamente hacia una plataforma escalable y fácilmente medible", explica el analista de Morningstar Ali Mogharabi.
Sin embargo, algunos seguían siendo cautelosos sobre si la compañía estaba claramente en una senda de crecimiento sostenible.
"Un buen trimestre no cambia nuestra visión fundamental de que Snap ha trabajado duro para seguir mereciendo un múltiplo premium", señala el analista de Jefferies Brent Thill, a Reuters.