Bolsa, mercados y cotizaciones

El Ibex 35 establece un suelo fiable pero no puede evitar la vulnerabilidad del rebote

  • La pérdida de los 9.800 puntos podría derivar en una una caída adicional del 8%
  • La renovada fortaleza del euro y la fatiga de wall Street impiden que Europa aleje las dudas

La zona de los 9.800 puntos hasta los que el índice cayó el miércoles se han consolidado como el suelo de la crisis catalana después de que en ese nivel se generará una reacción alcista, a la par con las bolsas europeas, que, sin embargo, no pudo esconder su fragilidad en la recta final de la semana

El cierre semanal de las bolsas deja una sensación de cierto desasosiego. La gripe otoñal que el frenazo de Wall Street y la renovada fortaleza del euro han propagado en las bolsas europeas en las últimas sesiones no remitió, a pesar del amago de rebote que se vio el miércoles, cuando el Ibex 35 cayó hasta la zona de mínimos del 4 de octubre, es decir, de la crisis catalana -concretamente hasta los 9.890 puntos-, y, desde ahí, reaccionó al alza, alentando las esperanzas alcistas. Estos anhelos tendrán que seguir en cuarentena, porque aunque la reacción tuvo continuidad el jueves, dejando claro que "el rango entre los 9.800 y los 9.930 puntos es un suelo fiable", como viene repitiendo el equipo de analistas de Ecotrader desde hace semanas, las caídas del viernes confirmaron la vulnerabilidad del repunte.

La historia es similar en el resto de bolsas europeas y apunta a una cancelación prematura del rally de Navidad, del que ya desconfían los analistas -ver páginas 6 y 7-. Eso sí, con el extra de incertidumbre que sigue arrastrando el mercado español por el conflicto secesionista en Cataluña. De hecho, tras caer un 0,82% en la semana, el diferencial entre el comportamiento del Ibex 35 y del EuroStoxx 50, que cedió un 1,29% desde el lunes, desde que el ex presidente de la comunidad autónoma puso fecha al referéndum ilegal de independecia el 9 de junio es de casi 8 puntos porcentuales. En este periodo, el índice español pierde casi un 9% mientras que la referencia del Viejo Continente cae apenas algo más de un 1%.

"Finalmente la presión compradora que vimos el jueves no tuvo continuidad el viernes y esto impidió que en las bolsas europeas se formaran velas potencialmente alcistas que en el argot técnico se conocen como martillo", explica Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, quien considera que, por tanto, "el cierre semanal no invita al optimismo y habrá que esperar a ver lo que sucede la semana que viene para tomar decisiones operativas". La clave está ahora en que "si la semana que viene se pierden los mínimos que hemos visto esta semana, aumentarán las posibilidades de asistir a una profundización de las caídas en las bolsas europeas hasta los mínimos de agosto, y en el caso del Ibex 35, de perder la zona los 9.800-9.930 puntos, se abrirá la puerta a una caída que podría buscar los 9.000 puntos", según considera el analista del portal de estrategia de inversión de elEconomista. "Mientras no se pierdan los mínimos de esta semana aún existe un atisbo de cierta esperanza de que asistamos a un contraataque alcista", concluye.

Buena parte de este desasosiego en el que se encuentran los mercados tiene que ver con la fortaleza del euro en su cruce con el dólar -ver información adyacente- y el impacto que automáticamente se traslada a las compañías exportadoras. La moneda común cerró su tercera semana consecutiva revalorizándose contra el billete verde, con una subida del 1,10%.

Detrás de este contexto está la debilidad del dólar y de Wall Street por las dudas que se han generado en torno a la esperadísima reforma fiscal prometida por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, que ahora se debate en el Senado. Las bolsas norteamericanas muestran con la volatilidad de las últimas sesiones -el S&P 500 vivió su mayor caída y su mayor subida de los últimos dos meses esta misma semana- que quieren las bajadas de impuestos lo antes posible ante la extenuante escalada alcista que vienen protagonizando.

Más razones para los incrédulos de que este año se vuelva a ver un sprint alcista en los mercados de renta variable en la recta final. En el protagonismo que tomará el consumo en estas fechas se decidirá también el rally, en un contexto de sólido crecimiento económico y de beneficios empresariales.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky