
Dos días enteros ha durado en el mercado la fase de negación de la realidad hasta la sesión de ayer, cuando, un desplome del 2,85% en el Ibex 35, el mayor desde el sufrido la jornada del Brexit, le hizo entrar repentinamente en el capítulo del miedo.
La cuestión es ahora saber si los inversores llegarán al estado de pánico después del desplome de ayer, que situó al selectivo en los 9.964 puntos, habiendo perforado un soporte importante -también desde el punto de vista psicológico- como son los 10.000 enteros y después de que, a partir de la primera hora de negociación, con las órdenes automatizadas funcionando, se llevara por delante todas las referencias técnicas anteriores que había mantenido durante el verano, en plena escalada de tensión entre EEUU y Corea del Norte.
"La perforación de este nivel -con una primera zona de referencia en los 10.165 puntos- ha abierto la puerta a que el selectivo se haya dirigido a la base del canal de Macron, que discurre por la zona de los 9.800-9.930 enteros", asegura Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader. La zona crítica a vigilar para el Ibex pasan a ser los mencionados 9.800 puntos que, de perderse, daría lugar a mayores caídas.
El problema hoy, dicen los expertos, es que no se debe tratar de coger un mercado que cae como un cuchillo afilado y que solo puede provocar heridas, aunque no lo haga con un excesivo volumen de negociación. Según la media diaria de las tres sesiones de esta semana, el Ibex 35 ha movido unos 3.340 millones de euros, un 80% más que el promedio de todo el mes de septiembre. Sin embargo, el volumen queda lejos de otras jornadas de tensión en el mercado, como fue el Brexit -con más de 6.000 millones de euros el 24 de junio de 2016- o la devaluación china de agosto de 2015 -con 4.910 millones, según Bloomberg-.
La debilidad que muestra ahora el Ibex 35 ante el riesgo de un Catalexit está coincidiendo en tiempo con una Europa presionando sus resistencias. El Dax Xetra es ya el selectivo más alcista de Europa, con una revalorización del 12,97%, lo que le ha llevado a coronar máximos históricos en los 12.970 enteros. Incluso, esta semana el índice germano ha logrado adelantar al Ibex 35 con dividendos por primera vez desde el mes de febrero.
Pero la bolsa española no sólo ha abierto un hueco importante respecto a la de Fráncfort. Desde el 9 de junio, cuando se convocó de manera oficial el referéndum ilegal del 1 de octubre, la diferencia entre el mercado italiano y el español alcanza los 16 puntos porcentuales, provocada, principalmente, por una caída del Ibex 35 del 10%. Tras la caída de ayer, el selectivo nacional ha pasado a ser el menos alcista por ganancias entre los grandes índices europeos en 2017, con un alza del 6,55%, por detrás de Francia, Italia y Alemania y solo por delante del Footsie londinense, que sube un 4,55%.
La reacción de la bolsa al discurso del Rey podría llevar a los inversores a preservar sus ganancias anuales ante la entrada del mercado en una zona de incertidumbre, más aún cuando, tras las palabras del monarca, muchos apuntan a que el Gobierno podría apelar a la aplicación del Artículo 155 de la Constitución por el que intervendría la autonomía de la Generalitat. "La entrada en un callejón sin salida", como lo define Peter Garnry, jefe de estrategia de renta variable de Saxo Bank, ante "el golpe a la estabilidad económica de España está obligando a los mercados a reaccionar". Desde Ecotrader, la herramienta de inversión de elEconomista, se decidió ayer reducir exposición en 10 puntos porcentuales a la bolsa española, la mitad de la que existía, dejándola en el 66 por ciento en Europa.
Los valores más bajistas de la sesión fueron las entidades bancarias (ver información de la página siguiente), y la catalana Colonial, que perdió más de un 5,5%. Solo cerraron en verde tres valores: Abertis, que ganó un 0,91%, Siemens Gamesa, que se anotó un 0,86%, y ArcelorMittal, que avanzó un 0,18%.
Mantener posiciones
¿En qué momento está el mercado? Los analistas consultados por elEconomista coinciden en que ante el bloqueo político que vive España los inversores sopesan retirarse del mercado para preservar sus ganancias anuales. Y las caídas aún podrían ser mayores. En opinión de Nicolás López, de M&G Valores, "es posible que todavía la situación tenga que empeorar antes de tocar fondo, aunque no siempre se llega a una situación de pánico en una corrección".
Menos pesimista se muestra Rodrigo García, analista de XTB: "No descartamos algún rebote porque las caídas están siendo un tanto agresivas. Pero la bolsa ha tenido otras veces caídas del 2%, por crisis de deuda, por crisis subprime… esta es una más", agrega el experto.
La pauta general entre los expertos consultados es de mantener posiciones e ir aprovechando las oportunidades que dé el mercado en valores concretos. David Pina, de AcTivtrades se muestra conservador: "Habrá que esperar pacientemente a ver un suelo de mercado y un cambio de tendencia al alza antes de plantearse entrar largos en el Ibex 35". En esta línea coincide con Sergio Ávila, analista de IG, que se "mantendría en liquidez hasta ver una corrección más baja del índice o hasta ver visos de una posible solución al conflicto". Desde Renta 4, explican que "siempre y cuando la situación vaya recuperando cierta normalidad de forma progresiva, el impacto a medio plazo en valoraciones debería ser limitado, pero para ello es necesario que se frene la incertidumbre actual y permita estar ante valoraciones atractivas".
Los gestores consultados también coinciden en destacar que el hecho de que sean inversores extranjeros los que están deshaciendo posiciones y no comprando es lo que está provocando estas caídas. "A la hora de buscar información sobre España el inversor se encuentra con una serie de acontecimientos confusos que es normal que le echen para atrás", indica el analista de XTB.