
Las presentaciones de cuentas peores de lo esperado han llevado al selectivo español a tener el peor comportamiento entre los grandes del Viejo Continente, al acumular un descenso del 2,1%, hasta acabar en los 10.897 puntos. No hay peligro mientras no se pierdan los 10.377 puntos
Después de que la victoria de Emmanuel Macron eliminase gran parte de la incertidumbre política que se cernía sobre el mercado europeo, la atención ha vuelto a los fundamentales y a una temporada de resultados que en el Ibex ha sido especialmente negativa y le ha llevado a ser el índice con peor comportamiento del Viejo Continente.
El Ibex 35 retrocedió un 2,14% en las últimas 5 sesiones en su peor semana desde noviembre del pasado año. El viernes el índice español subió un 0,3%, hasta cerrar en los 10.897 puntos. El resto de grandes plazas europeas ha terminado en verde o con caídas muy menores la semana. El Dax alemán se anotó un tímido ascenso del 0,4%, en línea con el alza del 0,4 % del Mib italiano. Mientras, EuroStoxx 50 y Cac se dejaron un 0,6 y un 0,5%, respectivamente; y el Ftse 100 británico fue el que tuvo un mejor comportamiento, al revalorizarse un 1,9%.
A nivel técnico, las caídas de los últimos días no ponen, de momento, en peligro la tendencia alcista de fondo del Ibex 35. "El soporte de corto plazo de los 10.823 puntos se mantiene en pie y mientras no sea cedido no tendremos evidencias de debilidad que apunten hacia una consolidación más amplia o la posibilidad de haber visto un techo temporal en los ascensos de los últimos meses", indica Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader. En caso de perder ese nivel, según explica el experto, se abriría la posibilidad de asistir a una corrección más amplia que lleve al Ibex a buscar la zona de los 10.377 puntos, que es "la parte inferior del hueco que se abrió al alza tras la primera vuelta de las elecciones francesas, cuyo alcance veríamos como una inmejorable oportunidad para comprar bolsa española".
Durante la semana el selectivo español se ha visto rezagado frente al resto de Europa por una semana de resultados corporativos más negativos de lo esperado.
ArcelorMittal se llevó la peor parte con una caída semanal del 7,4% a pesar de haber presentado unas ganancias de más de 1.000 millones de dólares (unos 922 milloens de euros). A pesar de esta primera reacción de los inversores, los analistas siguen mostrándose positivos con respecto a la compañía: "En nuestra opinión, el mercado ha sobrerreaccionado y el principal riesgo es que la caída de precios del mineral de hierro continúe", indican en Renta 4.
Endesa sufrió la segunda peor caída al dejarse un 7,4% tras presentar un beneficio un 26% inferior al del mismo periodo de 2016. Los analistas ya aconsejaban deshacerse de los títulos de la eléctrica y estos resultados han hecho dudar a los expertos sobre la capacidad de la compañía para cumplir con la hoja de ruta marcada en su plan estratégico.
El tercer mayor descalabro fue el de Indra, que pese a aumentar sus ganancias un 77% no convenció al mercado por unos márgenes que no logran avanzar al nivel esperado. La empresa se fijó como meta alcanzar un margen del beneficio antes de intereses e impuestos del 10-11% en 2018, en contraste con el 5,2% conseguido en el primer trimestre. Otras dos compañías que no convencieron con sus cuentas fueron Dia y Telefónica, que acabaron la semana con caídas cercanas al 4%.
Caídas en Estados Unidos
Al otro lado del Atlántico, los principales índices acabaron la semana con leves caídas. A media sesión del viernes, el Dow Jones cedía un 0,6% en 5 días y el S&P se dejaba un 0,4%. El Nasdaq 100 aguantaba en verde y subía un 0,7%.