La casa de inversión estadounidense tiene claras sus preferencias en el sector financiero: en 2017 aumenta su exposición a tres bancos y la reduce en otros tres. Tan sólo no está presente dentro del accionariado de Bankia.
El gigante de la inversión decidió mover ficha la semana pasada dentro del sector financiero español. El 16 de marzo incrementó su posición en Bankinter, pasando del 3,33% al 3,5% actual, lo que supone 238 millones de euros; y un día más tarde hizo su aparición estelar en CaixaBank. No estaba presente en su accionariado hasta que el pasado viernes hiciera pública una participación del 3,029%, en total, unos 689 millones de euros.
Lo cierto es que BlackRock, considerado el mayor inversor de la bolsa española, tiene posiciones en todos los bancos españoles, excepto en Bankia. A comienzos del mes de marzo aprovechó la relativa recuperación de Banco Popular para reducir del 4,259% al 4,156% su exposición. Y el 13 de enero declaró también haber aminorado su participación en BBVA, hasta el 5,606% frente al anterior 5,762%, según datos ofrecidos por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CMNV).
Respecto a las dos entidades restantes, la última vez que BlackRock movió ficha fue el año pasado. Sobre el Banco Santander aumentó su exposición a finales del mes de octubre hasta el 5,071%. Y en agosto decidió bajar del 4% su presencia dentro de Banco Sabadell.
En total, BlackRock atesora más de 8.100 millones de euros del capital de los bancos españoles, lo que representa un 4,5% de su capitalización total, que alcanza los 182.500 millones de euros. Lógicamente, es en Santander y BBVA donde cuenta con las mayores posiciones dado su tamaño y representación dentro de la bolsa nacional. En total, son 4.127 millones en la entidad que preside Ana Botín; y otros 2.594 millones de euros en BBVA.
