
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) tiene claro que los CFD, los productos forex y las opciones binarias son los instrumentos financieros más perjudiciales para el pequeño inversor por su complejidad y grado de apalancamiento. El supervisor ha anunciado que los ha dejado fuera del asesoramiento financiero y limitado su comercialización, con serias advertencias en su venta. l Los espías de la CNMV confirman las irregularidades de los bancos en la venta de fondos
El 82% de los clientes que realizaron operaciones con CFD sufrieron pérdidas el año pasado, según la CNMV. En total han sido más de 30.600 clientes que se vieron afectados por los contratos por diferencia (CFD, por sus siglas en inglés), entre 1 de enero de 2015 y 30 de septiembre de 2016, provocando 142 millones de pérdidas. Los CFD están en la lista negra del supervisor, junto a los productos forex y opciones binarias, principalmente porque tienen una especial complejidad y pueden provocar pérdidas superiores a la inversión por su operativa de apalancamiento.
Al organismo presidido por Sebastián Albella le preocupa la rápida expansión de estos productos entre los pequeños inversores en los últimos años gracias a que permiten grandes operaciones con un capital limitado. Pero su operativa entraña alto riesgo al poder ocasionar pérdidas superiores a la inversión inicial por el fuerte apalancamiento.
Los CFD son contratos en los que un inversor y una entidad financiera acuerdan intercambiarse la diferencia entre el precio de compra y el precio de venta de un determinado activo subyacente (valores negociables, índices, divisas, tipos de interés y otras activos de naturaleza financiera) y no se negocian en un mercado secundario oficial, sino en la propia plataforma electrónica de la comercializadora.
Limitaciones y prohibiciones en su venta
En su cruzada para proteger al inversor, la CNMV ha prohibido que estos productos con un apalancamiento superior a diez veces o que las opciones binarias se comercialicen bajo el asesoramiento en materia de inversión.
Además, obligará a los intermediarios financieros a que adviertan expresamente a los clientes que la CNMV considera que "debido a su complejidad y riesgo, la adquisición de estos productos no es adecuada para clientes minoristas". Asimismo, la publicidad de estos productos tendrá que llevar la nota informativa de la CNMV de que no recomienda la inversión por su "complejidad y riesgo".
A partir de ahora, los clientes serán informados sobre el coste que asumirían si decidiesen cerrar su posición nada más realizar la contratación. En el caso de CFD y productos forex, será obligatorio que sean advertidos de que, debido al apalancamiento, las pérdidas pueden llegar a ser superiores al importe desembolsado inicialmente para la adquisición del producto.
Los comercializadores también estarán obligados a tener del cliente un texto manuscrito o grabación verbal que permita acreditar que es consciente de que el producto que va a adquirir es especialmente complejo y de que la CNMV considera que no es adecuado para inversores minoristas.
La CNMV admite que sigue estudiando nuevas medidas, en línea con las adoptadas en el entorno europeo, como limitar el nivel de apalancamiento de las inversiones en este tipo de productos, restringir la publicidad o las ventas a distancia utilizando centros de llamadas.