
Aunque parte de la tensión que se vive en el mercado de renta fija se ha achacado a Francia y al auge de Marine Le Pen en las encuestas (la líder del Frente Nacional que promete sacar a Francia del euro en seis meses si gana), la presión que afecta a la periferia se debe más al pulso que Grecia mantiene con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en opinión de Jacobo Blanquer, consejero delegado de Tressis Gestión.
Tras el escándalo en torno a François Fillon, el líder conservador, las encuestas dan ganador a Emmanuel Macron, candidato de En Marche, en segunda vuelta? ¿Cómo se tomaría el mercado su victoria?
Todo lo que no sea Marine Le Pen (Frente Nacional) se lo tomará bien. François Fillon era de los favoritos del mercado porque su propuesta económica es de liberalización del mercado. En cambio, Francia es un país muy intervencionista y Macron, de ganar, no iba a ser tan liberal. De todas maneras no descartaría del todo a Fillon. Es probable que no llegue a una segunda vuelta, pero le separa poca diferencia de Macron y su discurso puede encajar.
Por lo pronto el mercado de renta fija se ha tensionado...
En el caso de la deuda francesa sí que se debe al escenario electoral. Coincidió que cuanto más subió el spread frente a Alemania fue cuando salieron las primeras encuestas que daban como favorita a Le Pen. Pero la subida de rentabilidad que estamos viendo en los periféricos está más ligada a Grecia y a si el FMI seguirá apoyándola, aunque también influye el miedo a que gane Le Pen y se produzca un referéndum para que Francia salga del euro. En ese caso la periferia no sería la más perjudicada, sino Alemania.
Se está descontando también un nuevo ciclo en los tipos de interés en Europa, el mercado fecha en octubre de 2018 la primera subida... ¿Cuál cree que será la hoja de ruta de Draghi a partir de ahora?
La clave estará en cómo evoluciona la inflación en los próximos meses, si sigue subiendo en la segunda parte del año veremos presión para que el BCE no aguante el QE. Pero lo primero es ver un cambio en el discurso de Draghi y después alguna especie de tappering para poder pensar en subidas de tipos.
¿Emitirán menos deuda las empresas españolas este año respecto a 2016 ante el aumento de los costes de financiación?
Si continuamos en los niveles actuales seguirá habiendo emisiones porque en el medio plazo todas descuentan subidas de tipos. En el corto plazo podríamos ver cómo se tensionan las curvas según se publiquen nuevos sondeos en Francia, sobre todo de la periferia. Alemania podría actuar como refugio.
Se ha cifrado el impacto de menor regulación en la banca americana en un exceso de capital de 100.000 millones en los seis grandes bancos americanos, ¿es mejor opción de inversión que la banca europea?
El contexto para la banca americana es mejor porque la mayoría de sus negocios se desarrolla con tipos más elevados que en Europa, donde los márgenes son más justos por los tipos de interés. Además allí se tiende a una menor regulación en comparación con la que los bancos tienen en Europa. En valoración están relativamente parecidos. La banca americana tiene mejores expectativas pero están fijadas en precio.
Por poner el foco en la banca española, ¿ve necesaria una nueva ampliación de capital en Popular, como ya descuenta parte del mercado?
Popular tiene que ir a ampliación sí o sí. Lleva dos ampliaciones por valor de 5.000 millones de euros más una emisión de convertibles de 500 millones de euros para tener un banco en bolsa que vale 3.500 millones de euros y que ahora necesita, como mínimo, otros 2.500 millones debido a la mala gestión del presidente.
¿Cree que la bolsa seguirá tan aburrida como hasta ahora o romperá al alza o a la baja próximamente?
Seguiremos en este impasse algún tiempo. Por un lado tenemos riesgos políticos, también a Trump, el presidente de EEUU, que es más lo que cuenta que lo que al final hace y también los resultados empresariales, que están siendo buenos. Puede que corrija algo, pero no mucho. Puede que entre un 3 ó un 4% y es sano.