
El año que ha quedado atrás será recordado como un ejercicio en el que el nerviosismo de los inversores llevó a muchos de ellos a huir del mercado y buscar refugio. La bolsa española ha confirmado 2016 como el periodo con menor volumen de negociación desde el año 2004, cuando se intercambiaron cerca de 637.000 millones de euros. Los accionistas movieron sobre el parqué 652.907 millones de euros en renta variable a lo largo del ejercicio, lo que supuso una caída del 32,1% respecto a 2015. "En línea", dicen desde Bolsas y Mercados (BME), "con los mercados de todo el mundo".
Sólo en diciembre, los inversores intercambiaron 48.987 millones de euros, un 27,5% menos que el mismo mes de 2015, y eso que la bolsa protagonizó un rally prenavideño que llevó al Ibex 35 a subir un 9,3%, desde los 8.607 puntos hasta los 9.412 puntos.
Esta caída en la negociación se produce después de tres ejercicios consecutivos en los que los volúmenes en la bolsa española venían recuperándose, desde el mínimo marcado en 2012, por debajo de 700.000 millones anuales. Lejos queda el máximo conseguido en el año 2007, previo a la crisis, con más de 1,7 billones de euros negociados.
Aunque lo cierto es que los inversores negociaron menos dinero, pero en prácticamente el mismo número de operaciones. Si bien es cierto que las interacciones entre accionistas cayeron (se produjeron un 12,1% menos en 2016, hasta las 54,4 millones de operaciones), éstas lo hicieron tres veces menos que el volumen negociado.
Si los inversores huyeron de la renta variable fue porque 2016 aglutinó en doce meses acontecimientos tan significativos como el desplome del petróleo y la devaluación del yuan; el Brexit que dio lugar a la mayor caída en una sesión del Ibex (hasta un 12,3%), el desgobierno en España, la victoria de Donald Trump o el referéndum italiano. Y todavía queda por delante un "apretado calendario electoral", recuerdan desde Norbolsa, dado que "partidos euroéscepticos o extremistas pueden beneficiarse del descontento popular".
Renta fija
La negociación en deuda pública se disparó un 60,6% en 2016 respecto al año anterior, hasta los 174.816 millones de euros, y eso que el bono español estuvo al borde de dar pérdidas en los últimos doce meses. Cayó, sin embargo, un 66% el volumen intercambiado en bonos corporativos hasta un 66,4% menos que en 2015, con 172.962 millones.