Bolsa, mercados y cotizaciones

Goldman Sachs, a punto de ebullición con Trump de inquilino en la Casa Blanca

  • Las acciones de la entidad acumulan una subida de más del 30%

"Donald Trump puede acabar siendo mejor presidente que otros que han ocupado el cargo", revelaba Lloyd Blankfein, capitán de Goldman Sachs, al diario alemán Handelsblatt a comienzos de mes. Un entusiasmo no percibido durante la campaña electoral pero que desde el pasado 9 de noviembre es más que evidente en el 200 del West Side de Manhattan, donde se asienta la multimillonaria sede del banco. Y es que Blankfein tiene algo que agradecer al presidente electo.

Cuando todos vaticinaban que su victoria vendría acompañada de una hecatombe bursátil, los oráculos volvieron a equivocarse, como ya lo hicieron con el Brexit, con del S&P 500 revalorizándose más de un 5% y el Dow Jones acumulando una subida más de 1.487 puntos.

Precisamente, con este indicador acariciando la meta de los 20.000, es inevitable señalar como Goldman, uno de sus 30 blue chips, ha contribuido a una cuarta parte del impulso registrado por el índice desde la resaca electoral. Sus títulos acumulan subidas de más del 30%.

No es para menos. El banco, que ha sufrido cierto ostracismo por la administración del todavía presidente, Barack Obama, quien siempre tuvo mayor afinidad con Jamie Dimon, el homólogo de Blankfein en J.P. Morgan, regresará a Washington D.C. por la puerta grande. Si Obama negó a los militantes de Goldman puestos de referencia en su gobierno, recordemos que el demócrata solía referirse en 2009 a los banqueros como "gatos gordos", Trump ha decidido tirar de su cantera para suplir puestos clave en su próxima administración.

Quizás uno de los más significativos es el de Steven Mnuchin, quien además de formar parte de la cantera de Goldman también fue director financiero de la campaña de Trump y conocido productor de Hollywood. El nominado para tomar las riendas del Departamento del Tesoro se sumará, si es aprobado por el Senado, al linaje de ex empleados del banco que han dirigido la mayor economía del mundo.

Predecesores

Sus predecesores en estos menesteres, Henry Paulson bajo la administración de George Bush, y Robert Rubin, durante la era Clinton, no estuvieron exentos de polémica. El primero por tener que lidiar con el impacto de la crisis financiera de 2008 que instigó el rescate público de los principales bancos en la cuna del capitalismo. El segundo por haber abierto la veda al sector bancario estadounidense fomentando la toma de riesgos que casi una década más tarde catapultó a la economía mundial hacia la Gran Recesión.

Mnuchin sustituirá así a Jack Lew, el actual secretario del Tesoro quien ha contado con un periplo sin demasiados sobresaltos, algo que no ocurrió con su predecesor, Tim Geithner, quien tuvo que enfrentar la resaca de las crisis financiera de 2008. El nominado por Trump para gestionar el Tesoro fue capitán durante dicho azote de OneWest Bank y orquestó un gran número de desahucios que ahora juegan en contra de su aprobación en la Cámara Alta.

El presidente electo también barajó la posibilidad elegir a Jamie Dimon, consejero delegado de J.P. Morgan para el puesto sin embargo los rumores viran en dos direcciones. La primera, que Dimon, quien se distanció de la Casa Blanca y Obama cuando su entidad fue multada con 13.000 millones de dólares en 2013 por su papel en la crisis, no estaba interesado en ocupar un cargo público. Otros apuntan que el inversor Carl Icahn, consejero especial de Trump, se opuso completamente a considerar a Dimon para el cargo y promocionó a Mnuchin para el puesto.

Pero Mnuchin no es el único postulante de la administración Trump, que entrará en vigor oficialmente el próximo 20 de enero. El polémico Stephen Bannon, elegido como estratega jefe del próximo gobierno, también militó las filas de la entidad financiera al igual que Anthony Scaramucci, uno de las figuras clave del equipo de transición del presidente electo, curtido en el banco que el periodista de la Rolling Stone, Matt Taibbi, apodó en abril de 2010 como "el calamar vampírico en la faz de la tierra".

Consejo Económico Nacional

Aún así, la contratación más jugosa por parte del próximo gobierno es la de Gary Cohn, hasta no hace mucho presidente y director de operaciones de Goldman. Su nombramiento como presidente del Consejo Económico Nacional coloca al banco en el epicentro de la administración Trump y de paso elimina la presión sobre los hombros de Blankfein, quien ya no tendrá que jubilarse para dar paso al que hasta ahora era considerado su delfín.

Con este despliegue de Goldmanites, como se conoce a los empleados del banco en la jerga financiera, se espera que la reforma financiera Dodd-Frank, aprobada por Obama como respuesta a la excesiva toma de riesgos durante los años previos a la crisis y uno de los lastres del sector financiero durante los últimos años acabe por morder el polvo. Especialmente está previsto que se derogue la regla de Volcker, nombrada en honor a Paul Volcker, el ex presidente de la Reserva Federal, que limita a los bancos realizar inversiones y otras operaciones especulativas con los depósitos de sus clientes.

Los expertos no observan que habrá trato de favor para Goldman. "Las leyes están escritas para todo el mundo, Goldman no disfrutará de excepciones en esta industria", dijo Colas, asegura Nicholas Colas, estratega de ConvergEx. Sin embargo, es cierto, que el cumulo de circunstancias sopla a favor del banco, que en los 9 primeros meses de este año ha visto como su beneficio neto ha caído un 1% los 4.934 millones de dólares.

Desde el repunte de las operaciones de compras y fusiones hasta la perspectiva de que la Fed subirá tipos hasta tres veces durante el próximo año pasando por las rebajas del impuesto de sociedades así como las inversiones en infraestructuras y la desregulación del sector financiero prometido por Trump.

"Pensamos que Goldman se encamina a un contexto de inversión mucho más propicio para el negocio de renta fija, divisas y materias primas", apunta Frederick Cannon, estratega jefe de Keefe, Bruyette & Woods. "Goldman se beneficiará más que sus homólogos dada la dependencia de la compañía en los ingresos de estas actividades", añade. KBW ha elevado las estimaciones de beneficio de Goldman para 2017 y 2018 en un 11,8% y un 13,9% respectivamente.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky