A poco más de 20 días de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, Peter Knowles, estratega de Morgan Stanley dentro de la división The Fulcrum New York Group, reconoce que esta será una votación "atípica" que estará determinada por la votación en "en contra y no a favor de un candidato".
Knowles hace referencia a las directrices de Mike Wilson, director de inversiones del banco estadounidense quién reconoce que los inversores han "paralizado sus decisiones" ante las circunstancias actuales. Tampoco se descartan movimientos bruscos a medida que nos acercamos al próximo 8 de noviembre.
"Al igual que ocurrió con el Brexit, necesitamos que pase esta incertidumbre y centrarnos en los fundamentales, como los resultados empresariales, buenos datos inmobiliarios, empleo y gasto del consumidor que nos llevarán a finalizar el año con fuerza", señala Knowles.
Sin embargo, en un momento en que según la Reserva Federal de Atlanta, la economía estadounidense creció en el tercer trimestre un 1,9% mientras que el PIB americano avanzó en la primera mitad del año poco más de un 1%, Knowles estima, haciendo referencia Comité Global de Inversión (GIC, por sus siglas en inglés) de Morgan Stanley que "la economía puede soportar una subida de 25 puntos básicos". Sin embargo advierte que no todas las áreas de Morgan Stanley estiman que habrá una subida de tipos este año y manifiesta que "muchas cosas pueden cambiar hasta entonces".
Recordemos que a día de hoy, el 64,3% del mercado descuenta una subida de tipos para la última reunión de política monetaria del año, que culminará el próximo 14 de diciembre. Aún así, la Reserva Federal no moverá ficha en el encuentro anterior, fijado el 2 de noviembre, a seis días de que los estadounidenses acudan a las urnas para elegir a su próximo presidente.
Sobre lo que nos depara el futuro dentro de la renta variable americana, Morgan Stanley prefiere no hacer proyecciones a corto plazo pero Knowles hace mención a los objetivos de Adam Parker, estratega jefe de renta variable quien estima que el S&P 500 se moverá entre los 2.400 y 2.500 puntos en 2020. "Recientemente aumentaba su precio objetivo para los próximos 12 meses que implica una subida del 15% desde los niveles actuales". Dicho esto, Knowles reitera que durante las próximas semanas y conforme llegamos a las elecciones "veremos vaivenes significativos".