Entre los productos que mayor rentabilidad han ofrecido en lo que va de ejercicio preponderan la renta variable brasileña y los metales preciosos. Entre los 20 mejores todos son fondos, ninguna sicav o plan de pensiones alcanza similares ganancias. Y solo dos son de una gestora española
Pocos presagiaban a comienzos de año, cuando las materias primas habían tocado fondo, que el de recursos básicos -donde se engloban las mineras- sería el mejor sector de Europa. Tampoco que la renta variable brasileña, que entre máximos de mayo de 2015 y mínimos de enero de este año se había desplomado un 35 por ciento, rebotaría con tanta fuerza desde entonces -el índice Bovespa sube un 42 por ciento en el año-. Pero, si se analizan cuáles han sido los productos que más ganancias han dado al inversor en el año (bien sean fondos de inversión, planes de pensiones o sicavs disponibles para comprar en España), uno llega a la conclusión de que ambos activos han sido, con diferencia, el camino hasta El Dorado.
Entre los 20 fondos (todos en euros) que mejor rentabilidad han ofrecido desde enero se cuelan, según los datos de Morningstar, ocho de renta variable brasileña y otros ocho del sectorial de recursos básicos; en concreto, con exposición a oro y mineras. Con ellos se ha podido optar a rentabilidades que llegan hasta el 71 por ciento en el caso del Share Gold, de la gestora Degroof Petercam, o del 69 por ciento en productos como Franklin Gold & Precious Metals y LO Funds - World Gold Expertise, que gestionan Franklin Templeton y Lombard Odier, respectivamente. Y en Brasil, alrededor de un 70 por ciento en fondos como Deutsche Invest I Brazilian Equities y HSBC GIF Brazil Equity.
A simple vista, se observan dos clásicos para el mundo de la inversión. En primer lugar, que las gestoras extranjeras preponderan (solo se cuelan dos fondos de Santander AM entre los 20 mejores). Y segundo, que todo son fondos (algunos con formato sicav luxemburgués), pero ningún plan de pensiones. De hecho, la rentabilidad lograda por estos últimos es, como mínimo, 40 puntos porcentuales inferior.
