
Día sí y día también se habla del entorno de bajos tipos de interés que reina en el mercado y de la dificultad que encuentra el inversor para obtener retornos. Sin embargo, Stuart Canning, especialista de multiactivos de M&G, considera que, aunque no hay nada malo en tener una expectativa bajista o creer que se avecina un mundo de bajas rentabilidades, eso no puede condicionar la visión que un inversor tiene a largo plazo del mercado porque, de lo contrario, se perdería las oportunidades actuales.
"Dentro de 20 años, los inversores jóvenes quizá echen la mirada atrás y deseen haber estado presentes en la década actual, cuando invertir era tan fácil", sentencia.
Canning apunta que en todas las épocas de la historia se ha tenido la sensación de que el mundo estaba empeorando. Y ahora, en cambio, "el pasado parece ordenado. Pocos creen que en los noventa o a principios del nuevo milenio, la situación podría parecer tan incierta y aterradora como en la actualidad".
Sin embargo, continúa, si alguien se hubiese dejado llevar por ese pesimismo del que algunos llevan hablando los últimos tres a cinco años de que nos adentramos en un entorno de tipos cero se habría perdido muchas de las oportunidades que han tenido lugar por el camino desde entonces. Por ejemplo, el especialista de M&G señala que en los tres años transcurridos hasta fin de diciembre de 2015 los principales mercados de renta variable han registrado rentabilidades nominales superior al 10% anual. Y en renta fija, los rendimientos también han superado en ese periodo los intereses que ofrecían hace tres años.
Pero centrado en el contexto actual de mercado, Canning también encuentra oportunidades: "Si hubiera estado dispuesto a prestar dinero a Japón a 30 años a un interés del 1,4% hace seis meses, ahora sería un 30% más rico".
Por todo ello aconseja a los inversores que la evolución actual de los precios no determine su visión de largo plazo porque podría perder la ocasión de acceder a retornos significativos que no se pueden desperdiciar en un momento como el actual.