
Mayo se marcha apático y dejando al Ibex 35 posicionado por encima de los 9.000 puntos (en concreto, en los 9.034 puntos), después de subir un 0,09% en su balance mensual. Básicamente arranca este miércoles junio desde la misma posición que un mes atrás, aunque con una clara diferencia: quedan ya muy pocos inversores.
Y es que durante el mes de mayo la bolsa española negoció un 40% menos que en abril, con una media diaria de 2.200 millones de euros, una cifra más propia de temporadas veraniegas. De hecho, no se veía tan poco movimiento en el mercado nacional desde los meses de agosto de 2014 y de 2013.
El 26-J empieza a sentirse
"Con unas elecciones a la vuelta de la esquina, entendemos que el inversor final, el real, aquel que toma posiciones de cara al medio y largo plazo está ausente", reconoce Óscar Germade, responsable de análisis técnico de BNP Paribas Personal Investors. La caída de la negociación se ha notado particularmente en las últimas semanas, cuando la bolsa española ha llegado a mover en algunas sesiones menos de 800 millones, un 75% por debajo de la media diaria de 2016.
Pero, ¿a qué se debe? En primer término, cabe recordar que 7 de cada 10 euros que se negocian en España lo hacen inversores extranjeros, que no están viendo, precisamente, un panorama a medio plazo tranquilizador. "Hay gente que considera que las Elecciones Generales del 26 de junio no están teniendo impacto sólo por el hecho de que la prima de riesgo no se mueva, pero lo cierto es que muchos de ellos están esperando a ver qué sucede", apunta Victoria Torre, responsable de producto y análisis de Self Bank.
Es más, los analistas de JP Morgan no descartan, incluso, que pueda haber aún más "incertidumbre" en el mercado tras estos comicios, de los que, dicen, podría forzarse a los partidos a formar "un gobierno por tiempo limitado" que, al menos, "desatascaría la situación".
Las elecciones en España tendrán lugar tres días después de la cita en torno a la cual gira el mes de junio: el referéndum sobre el Brexit, que se celebrará el próximo 23 de junio. "Tenemos un escenario repleto de interrogantes que hace muy complicado tomar posiciones", asegura José Luis Martínez Campuzano, estratega jefe de Citi en España, que apunta a Reino Unido como uno de los riesgos sobre los que "todo el mundo coincide que puede degenerar en una catástrofe" dentro de un mercado que, en su opinión, está claramente "acotado".
Esto no sólo se debe a las incertidumbres políticas, sino también por las exiguas expectativas de crecimiento que manejan los expertos para las compañías.
Valores defensivos
Con los índices, por lo tanto, encerrados en un canal muy delimitado, el cambio que separaría un simple rebote de la vuelta a una tendencia alcista sigue pasando por "superar los huecos a la baja que dejaron los índices el primer día del año", según Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, para "alejar", al menos, el riesgo de ver nuevas caídas. Esta zona, en el caso del Ibex, siguen siendo los 9.544 puntos, de los que le separa una distancia del 5%.
Títulos vinculados al consumo y que han mostrado una clara fortaleza en el mercado desde los mínimos del año pasado se posicionaron como los vencedores del mes de mayo. Dia fue el valor más alcista (tras subir más de un 10,8% y después de presentar unas favorables cuentas en España), seguido de Inditex, que se anotó otro 8,7%, y por detrás aparecen valores como Grifols, Mediaset e IAG, con ganancias que superaron el 4%.
Cinco bancos coparon, sin embargo, las ocho últimas posiciones del Ibex 35. Banco Popular, lógicamente, fue el peor de todos ellos, con una pérdida mensual del 30%, tras anunciar una ampliación de capital por 2.500 millones de euros; y arrastró consigo a toda la banca mediana.