
Han sido años duros para las cotizadas europeas. La dificultad que han encontrado para rentabilizar sus negocios se ha dejado sentir en bolsa y también en las perspectivas que las casas de inversión mantenían sobre sus títulos. Sin embargo, el viento a favor que ha supuesto un euro débil y los bajos precios del petróleo ha ayudado a mejorar sus beneficios y también la recomendación que las casas de análisis emiten sobre las compañías del Viejo Continente. No había tantas empresas con consejo de compra desde 2010.
Si por algo se han caracterizado los últimos años en mercado ha sido por la dificultad de encontrar compañías sobre las que los expertos aconsejaran tomar posiciones. Detrás se encontraban no solo unos balances deteriorados por la propia crisis, sino la elevada volatilidad de los mercados de renta variable. Sin embargo, desde hace un año aproximadamente, las políticas expansivas de los bancos centrales en general y del europeo en particular han servido para debilitar a un euro que ha dotado de competitividad a las empresas. En las últimas sesiones, no obstante, la divisa comunitaria se ha apreciado en torno a los 1,14 dólares, poniendo el peligro el efecto Draghi.
Este nuevo escenario ya empieza a descontarse en las expectativas de los analistas. La prueba es que, poco a poco, el número de europeas con recomendación de compra va creciendo. A día de hoy, en el Eurostoxx 50 lucen este consejo 18 compañías, seis más que a finales de año. Se trata del nivel más elevado de los últimos seis años.
Con nombres y apellidos
Los nombres de las cotizadas que han conseguido a lo largo de este ejercicio situarse entre las preferencias de los analistas y que a finales de diciembre no lo hacían son LVMH, Orange, Nokia, Carrefour, BNP Paribas o Deustche Telekom. En todas ellas el consenso de mercado recogido por FactSet recomienda incluirlas en cartera, mientras que en diciembre tan solo estimaban oportuno mantenerlas en el caso de que ya estuvieran compradas.
Además de estas, otras de grandes capitalizadas europeas que lucen un cartel verde son Axa, Vinci, Daimler, Enel, Intesa Sanpaolo, Engie, Essilor, Orange, Sap, Nokia, Safran o Airbus. En cambio, ninguna de las cinco españolas que cotizan en el EuroStoxx 50 (Santander, Inditex, Iberdrola, Telefónica y BBVA) luce un cartel de compra. La que más cerca está de lograrlo, no obstante, es Inditex.
En el lado opuesto, solo existe un farolillo rojo entre las grandes empresas del Viejo Continente. Se trata de Deutsche Bank. En diciembre, por el contrario, hasta tres empresas eran una venta para la media de bancos de inversión: BASF, Eni y Volkswagen.