
La Bolsa de Nueva York terminó en una fuerte baja este lunes y ha sufrido su mayor caída desde la del '17-S', afectada por el banco de inversiones Lehman Brothers, que se colocó bajo la protección de la ley de quiebras, la compra de Merrill Lynch y el hundimiento del asegurador AIG: el Dow Jones perdió 4,42% y el Nasdaq 3,60%.
El Dow Jones (DJI.NY) Industrial Average (DJIA) abandonó 504,48 puntos a 10.917 unidades. No había cerrado bajo los 11.000 puntos desde el 15 de julio.
El índice Nasdaq (NDX100.NQ), de alto componente tecnológico cedió 81,36 puntos a 2.179,91 unidades y el índice ampliado Standard & Poor's 500 (SP500.CH) descendió por su parte 4,64%, o 58,06 puntos, a 1.193,64 unidades.
Después de resistir bastante bien durante gran parte de la sesión, los índices aumentaron sus pérdidas en los últimos minutos. "El mercado enfrentó muy, muy, muy malas noticias", resumió Peter Cardillo, de Avalon Partners. "En vista de esas malas noticias, el mercado resistió bastante bien", estimó Cardillo, agregando que "podía haber sido peor".
"Ello se debe sin duda a que las dificultades del sector financiero duran desde hace tanto tiempo que el mercado se esperaba ya esas noticias".
Después de semanas de especulaciones y un fin de semana de suspenso, Lehman Brothers se colocó bajo la protección de la ley de quiebras, ante la ausencia de un comprador. El título, cuya cotización fue suspendida en la bolsa de Nueva York, se desmoronó en las operaciones electrónicas, bajando 94%, a 21 centavos.
Su rival directo, también muy expuesto a la crisis inmobiliaria, Merrill Lynch (MER.NY) (+0,06%) será adquirido por Bank of America (-21,31%) en 50.000 millones de dólares en acciones.
La quiebra de Lehman
Los inversores han visto despejada parte de la incertidumbre de la jornada en la recta final, tras anunciarse que la aseguradora American International Group había obtenido un permiso especial del Estado de Nueva York para acceder a 20.000 millones de dólares de capital en manos de sus filiales. La aseguradora había acudido a la Fed en busca de un crédito por valor de 40.000 millones para enfrentar la depreciación de sus activos como consecuencia de la crisis de las hipotecas de alto riesgo que dura ya 13 meses.
No obstante, la negativa del Gobierno estadounidense a intervenir en la quiebra de Lehman Brothers, tal y como hizo hace una semana para salvar a las dos mayores hipotecarias del país, Fannie Mae y Freddie Mac, ha encendido las alarmas en el sector financiero. Diez de los principales bancos del mundo, entre los que se encuentra el propio Bank of America (BAC.NY), se han asociado para crear un fondo para enfrentar los problemas de liquidez.
Inyección del Banco Central
Mientras, al otro lado del Atlántico, el Banco Central Europeo realizaba una inyección de 30.000 millones de euros que no ha cumplido su objetivo de aliviar las pérdidas superiores al 4% de los mercados del continente.
El secretario del Tesoro de EEUU, Henry Paulson, ha defendido la decisión de su Gobierno de permitir la bancarrota del banco de inversión Lehman Brothers, pero sin descartar que en el futuro pueda intervenir para evitar otras quiebras. "No me tomo a la ligera arriesgar el dinero público", ha concluido.
El mercado obligatorio subió netamente. El rendimiento del bono del Tesoro a 10 años cayó 3,483%, contra 3,730% en la noche del viernes, y el de los títulos a 30 años a 4,152%, contra 4,326%. El rendimiento de las obligaciones evoluciona en sentido opuesto a sus precios.