
Tanto el Brent, de referencia en Europa, como el West Texas, en EEUU, se dejan hoy más de un 2%, hasta los 38 y 36 dólares, respectivamente, encadenando su segunda sesión a la baja y la peor racha en un mes. Con la caída de hoy, el americano ya ha entrado en terreno negativo en el año y pierde un 1,9%. Por su parte, el europeo se apunta todavía un 2% en 2016.
Estas caídas se producen después de que Irán haya mostrado su intención de elevar la producción a niveles previos a las sanciones, antes de volver a participar en conversaciones para su congelación, algo que habría aumentado el valor del crudo.
"Irán tiene previsto aumentar en torno a un tercio su producción, hasta los cuatro millones de barriles al día, antes de plantearse participar en cualquier iniciativa encaminada a reequilibrar el mercado", ha asegurado el ministro del petróleo Bijan Namdar Zanganeh, según recoge Bloomberg.
No obstante, la postura de Rusia, sorprendentemente, ha sido de apoyo al país. El ministro de Energía ruso, Alexander Novak, ha afirmado tras reunirse con su homólogo iraní que éste tiene "argumentos razonables" para no unirse a una alianza para limitar la producción.
Reunión de la OPEP
Eso sucede en un escenario de incertidumbre que rodea al petróleo ante la posible reunión de los países de la OPEP y no OPEP. El evento, previsto en un principio para el 20 de marzo, podría haberse aplazado hasta el mes de abril.
Precisamente, la posibilidad de que los principales productores decidieran de manera coordinada una congelación de la producción había alimentado las recientes subidas del petróleo la semana pasada, del 4,3% en el caso del Brent y del 7,2% del West Texas.
Según la OPEP, la producción iraní se ha incrementado durante el mes pasado a máximos de casi dos décadas tras el fin de las sanciones internacionales. Además, las reservas de EEUU se mantienen en su nivel más alto desde 1930, según Bloomberg, después de incrementarse durante la semana pasada.