
El Tesoro Público ha vuelto a cerrar una nueva subasta de deuda a corto plazo colocando el objetivo máximo fijado, de 5.000 millones de euros, aunque ha tenido que ofrecer a los inversores un mayor rendimiento que en la anterior subasta similar, celebrada el pasado 19 de agosto.
En concreto, el organismo ha adjudicado 1.220 millones de euros en letras con vencimiento a seis meses. La rentabilidad media ha pasado del 0,080% registrado hace un mes al 0,111% de hoy.
Además, se han colocado otros 3.780 millones de euros en papeles a 12 meses, por los que ha ofrecido un interés medio del 0,219%, por encima del 0,160% de agosto.
En cuanto a la demanda, el ratio de cobertura en las letras a medio año ha superado en 2,4 veces lo vendido, igual que en la anterior emisión, mientras que a 12 meses las peticiones que han superado en 1,75 veces lo colocado, ligeramente inferior al del mes pasado.
Desde el comienzo del año, el Tesoro Público ha captado 104.347 millones de euros dentro del programa de financiación regular a medio y largo plazo, lo que supone el 80,7% de la previsión de emisión incluida en la estrategia para 2014.
A cierre del segundo trimestre, la deuda del conjunto de las administraciones públicas se incrementó el 1,6% con respecto a los tres meses anteriores hasta alcanzar los 1.012.643 millones de euros, según datos del Bando de España. Esta cifra equivale al 98,9% del PIB y lo que supone un nuevo récord: es la cuantía más elevada de la serie histórica de deuda trimestral del supervisor, que arranca en 1995.
Este jueves, el Tesoro volverá a apelar a los mercados en busca de financiación con una nueva emisión de bonos con la que intentará captar entre entre 2.500 y 3.500 millones. Se trata de una nueva referencia a tres años con cupón del 0,50% y vida hasta el 31 de octubre de 2017.