
La bolsa neoyorquina ha superado de nuevo los 14.000 puntos, después de perderlos desde el pasado 1 de febrero. El Dow Jones de Industriales, su principal indicador, ha subido un 0,34%, llegando a los 14.019.
Por su parte, el compuesto tecnológico Nasdaq ha perdido un 0,19%, en los 3.186 mientras que el selectivo S&P 500 ha alzado sus resultados un 0,13%, en los 1.519 puntos.
El Dow Jones y el S&P 500 registraron esas ganancias en una jornada falta de impulsos mientras todas las miradas se concentraban en el discurso sobre el estado de la Unión que pronuncia el presidente de EEUU, Barack Obama, centrado en la recuperación económica.
Más de dos tercios de los componentes de ese índice acabaron al alza, capitaneados por Bank of America (3,25%), el productor de aluminio Alcoa (1,8%), la tecnológica Hewlett-Packard (1,6%), la cadena de tiendas para mejoras del hogar Home Depot (1,42%) y la operadora AT&T (1,05%).
El lado opuesto de la tabla lo lideró el fabricante de refrescos Coca-Cola, que se dejó el 2,72% pese a haber anunciado antes de la apertura que ganó 9.019 millones de dólares en su ejercicio fiscal 2012, el 5% más, mientras que tan solo en el último trimestre elevó sus ganancias en un 13%.
Fuera de ese índice, el gigante tecnológico Apple perdió el 2,52% después de que su consejero delegado, Tim Cook, no diese indicios de un nuevo reparto de dividendos entre sus accionistas a corto plazo, como algunos habían anticipado, durante su intervención en la conferencia tecnológica de Goldman Sachs en San Francisco.
También destacaron en el Nasdaq los descensos de la red social Facebook (-3,15%) y la canadiense BlackBerry (-3,24%).
Sorprendió por otra parte la subida del 8,77% de la firma de ropa y complementos Michael Kors tras anunciar que sus ingresos trimestrales se dispararon el 70% y elevar sus pronósticos de ganancias para el actual ejercicio.
En otros mercados, el petróleo de Texas subió a 97,51 dólares por barril, el oro descendió a 1.649,6 dólares la onza, el dólar perdía terreno frente al euro (que se cambiaba a 1,3454 dólares), y la rentabilidad de la deuda estadounidense a diez años avanzaba al 1,98%.