
Los alcistas mantienen el buen tono por segunda jornada consecutiva en el mercado español. El Ibex 35 subió un 0,45%, hasta 6.267,8 puntos, tras oscilar entre un máximo de 6.332,7 puntos y un mínimo de 6.231,3 puntos, mientras los inversores movieron 1.372 millones. Mientras, la prima de riesgo cae por segunda día consecutivo y cierra en 509 puntos básicos.
"Al cierre de la sesión lo más destacable ha sido ver como la presión compradora ha mantenido a raya en todo momento a unos bajistas que esta semana están tomándose un respiro, algo que las bolsas podrían aprovechar para desplegar un rebote más sensible", comentan Joan Cabrero, analista de Ágora AF, en Ecotrader.
"En este sentido, ayer lunes ya tuvimos pistas que apuntaban hacia la posibilidad de haber visto un suelo temporal en las caídas, gracias a las pautas de tipo envolvente alcista que formaron muchas curvas de precios, y lo de hoy ha sido una jornada consolidativa que no ha aportado cambios significativos dentro de esa hipótesis de giro alcista", añadía.
Operativamente, una corrección a corto que sirva para que el Ibex corrija parte del ascenso de ayer, sería una oportunidad para aumentar exposición alcista en este índice en aras a buscar un rebote de forma agresiva.
El mejor valor de la sesión fue Gamesa, que avanzó un 8,62%, seguido de Sacyr Vallehermoso, con un 6,91%, FCC con un 3,77%, Abengoa un 3,62% y Mediaset, con un 3,16%.
Entre los grandes, el mejor fue Repsol con una avance del 1,92%, seguido de Santander con un 1,17%, BBVA con un 0,66%, Inditex un 0,48%. Telefónica, por su parte, retrocedió un 0,87%, lo mismo que Iberdrola. El peor valor fue OHL, con un 2,13%. (Un vistazo al Ibex 35, al Eco 10 y al resto del mercado)
Ayer regresaron las compras a los parqués tras el calvario de la semana anterior y la bolsa española estuvo a la cabeza desplegando un patrón alcista.
Pero quedan todavía muchas incertidumbres por despejar: este miércoles se reúne el Banco Central Europeo (BCE), y lo hará antes de la cumbre europea de finales de mes. Además, no hay que perder de vista las elecciones griegas que se celebrarán en apenas un par de semanas.