
Sigo frotándome los ojos al ver cómo las bolsas europeas están superando ampliamente a las norteamericanas en este comienzo de año. Un ejemplo claro de ello es que el EuroStoxx 50 acumula ya una rentabilidad del 10%, mientras que los todopoderosos Nasdaq 100 y S&P 500 aún no alcanzan el 4%.
El ímpetu alcista que provocó la elección de Donald Trump fue posteriormente contenido por la irrupción de DeepSeek. Esta situación me recuerda a la canción que impulsó a Héroes del Silencio al estrellato: "Entre dos tierras". Y es que, desde la aparición de DeepSeek, las bolsas norteamericanas han estado oscilando entre dos niveles clave: el soporte del hueco alcista generado tras la victoria de Trump y el hueco bajista provocado por la irrupción de DeepSeek.

Mientras este hueco bajista no se cierre de manera generalizada, y cuando digo generalizada me refiero no solo al Nasdaq 100 o al S&P 500, sino también a índices clave como el Nasdaq Composite, no quiero saber nada de la bolsa norteamericana. Al menos hasta que los índices busquen apoyo en el hueco alcista de Trump. Para contextualizar, el S&P 500 se encuentra a un 5% de ese soporte, que ya detuvo las caídas a mediados de enero en los 5.775 puntos, mientras que el Nasdaq 100 está a un 7,5% de soportes similares en los 20.227 puntos.
Para que podamos hablar de fortaleza y para que Wall Street deje atrás el proceso de consolidación lateral en el que lleva inmerso desde mediados de diciembre, es necesario un empujón superior al 2% que permita al Nasdaq Composite superar la resistencia de los 20.000/20.200 puntos. Por ello, prudencia antes de precipitarse con nuevas compras. Como suelo decir, este 2025 será un año largo y volátil, y apenas estamos comenzando. Aquellos con mentalidad de francotirador, que sepan esperar pacientemente a sus oportunidades, dormirán mucho más tranquilos.
Mientras en Wall Street observamos el desenlace del pulso entre alcistas y bajistas, en Europa seguimos disfrutando de un comienzo de año espectacular. El EuroStoxx 50 se encuentra ya a solo un 3% del objetivo de máximos históricos alcanzados durante la burbuja tecnológica del 2000, situados en los 5.500 puntos, algo que hemos repetido insistentemente desde elEconomista.es. Disfrutemos, pero con "seny": es irreal esperar que las bolsas europeas suban un 8% cada mes. Vendrán vaivenes y consolidaciones, y para nuevas compras, sugiero esperar a que el mercado digiera esta subida.
