
La salida de Álvarez-Pallete de Telefónica se llevó casi un 3% de la acción este lunes hasta los 3,86 euros, mínimos de marzo del año pasado. El mercado penaliza a la compañía por el relevo dentro de la cúpula de la 'teleco', que implicaría pérdidas para la SEPI superiores al 5% si decidiera hoy cerrar su participación. Ni siquiera el cobro del último dividendo amortigua las minusvalías que sí permite a los otros dos grandes accionistas limitar la caída de Telefónica en el año.
No es que el Estado, a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) quiera liquidar su posición dentro del valor del Ibex 35 que acapara este lunes la atención de los inversores. Pero la aceptación de los principales accionistas de la compañía de cambiar la presidencia se lleva la acción de Telefónica lejos de los 4,072 euros a los que compró la SEPI (precio ponderado de las múltiples operaciones que culminaron en mayo del año pasado) que elevó la participación de la misma hasta el 10%.
Desde el último asalto de la empresa pública en Telefónica se cobró a su vez un dividendo de 0,15 euros por título que suman una rentabilidad adicional a la evolución del precio de las acciones. Sin embargo, aun con este pago la SEPI sigue acumulando minusvalías de casi un 1,5%. Por contra, Criteria Caixa sí que se libraría de las pérdidas gracias al rendimiento del último dividendo repartido en Telefónica, al encontrarse su precio de compra medio por debajo de los 4 euros por título.
Saudi Telecom Company, STC, es el tercer gran accionista en la actualidad dentro de Telefónica. Ligado al fondo de pensiones de Arabia Saudí, la compañía cuenta con un 4,9% de la 'teleco' española en acciones directas más un 5% en derivados. Hasta la fecha, el grupo saudí ha manifestado que su participación en Telefónica responde solo a una operación financiera. Si decidiera hoy salir de Telefónica, aún sacaría un 2,9% de rentabilidad a su operación que escalaría hasta rozar el 7% si se suma el dividendo de diciembre.

En una jornada en la que el mercado está recalibrando sus estrategias en Telefónica, el consenso de mercado que recoge FactSet recomienda mantener posiciones, si bien es cierto que son varias las firmas que cambiaron recientemente su consejo a vender por el periodo de incertidumbre que se abre en la compañía y por la lectura que realizan varias firmas de análisis de la injerencia política a la hora de tomar la decisión de destituir a Álvarez-Pallete. Con todo, el precio objetivo de Telefónica se sitúa en los 4,3 euros que implicarían un potencial del 11,7%.