
El Gobierno ha tomado el control de Telefónica y lo ha hecho sin disimulo porque fue el jefe de la Oficina Económica, Manuel de la Rocha, quien le comunicó en Moncloa su salida al ya ex presidente, José María Álvarez-Pallete. En la reunión estaba el representante de STC, la multinacional saudí por la que la Sepi entró en Telefónica para defender los intereses nacionales, lo que muestra que era una excusa y que no existe tal amenaza. El Gobierno elige para el cargo a Marc Murtra, el presidente de Indra, que dobló su valor en bolsa durante su mandato y con un curriculum ligado a la tecnología, lo que permite afrontar la nueva etapa con garantías a falta de conocer a su equipo. El Ejecutivo revive así su proyecto de absorción de Indra por parte de Telefónica en el futuro.