
Continúan las bajadas del euríbor por cuarto día consecutivo, con el índice hipotecario situándose este 25 de septiembre de 2024 en el 2,776%, dejando atrás la barrera del 3% en la que se encontraba instaurado en las pasadas jornadas e, incluso, descendiendo del 2,8% que marcó este martes. Los mercados financieros también se han puesto en marcha descontando más caídas a medio plazo. Para diciembre de 2025, los futuros anticipan un euríbor al 1,8%.
Los futuros del euríbor se resistían a descontar las últimas bajadas agresivas del índice a medio plazo. Esta semana están comenzando a responder a las recientes caídas que le están llevando a cotizar por debajo del 3%. Los contratos de futuros a tres meses para el mes de diciembre han derribado esta semana este nivel y se sitúan este miércoles en el 2,91%. El euríbor hace dos semanas que lo hizo, pero los inversores no terminaban de creerse los últimos descensos y cubrir sus posiciones. Toda la curva de futuros se ha movido y, para finales de 2025, anticipan que el euríbor se situará alrededor del 1,8%. Hasta hace poco se estaba moviendo entre el 2% y el 2,5%. Los futuros de diciembre de 2025 no estaban tan bajos desde agosto de 2022, justo en el inicio del ciclo alcista de tipos del BCE.
Los futuros del euríbor son instrumentos financieros derivados que permiten a los inversores y empresas protegerse frente a las variaciones de los intereses. El euríbor responde al tipo de interés medio al que los principales bancos de la zona euro se prestan dinero a corto plazo. Los bancos luego trasladan el coste de los préstamos, en forma de intereses, a sus clientes. Por ello, los contratos de futuros facilitan la vida para reducir el riesgo crediticio.
Un contrato de futuro se basa en el precio que los inversores esperan que tenga en una fecha próxima determinada. Para el euríbor, el más común está ligado al euríbor a tres meses y los analistas e inversores lo suelen utilizar como indicador fiable del camino que recorrerá el euríbor a doce meses, al que está referenciado las hipotecas. Cuando una empresa o un inversor compra un futuro del euríbor, no está adquiriendo directamente el índice, sino el derecho a intercambiar el índice al precio fijado en la fecha de vencimiento del contrato. Por ello es un buen indicador para intentar prever el euríbor a medio plazo.
El euríbor y el correcaminos
El problema es que ahora mismo el euríbor está corriendo demasiado para los analistas que siguen los mercados financieros y los propios mercados financieros. El índice ya se sitúan por debajo de las previsiones de la mayoría de casas de análisis que había realizado antes del verano. Para los expertos el euríbor terminaría 2024 en el 3%. Pero la velocidad que está cogiendo los recortes apuntan a que la referencia de las hipotecas se quedará por debajo de este nivel. Funcas, unos de los think tank más prestigioso del país, elabora un panel de expertos donde se recoge las previsiones económicas del país, y por extensión de ciertas variables financieras como el euríbor, y lo sitúa en el 2,83%. Y los analistas de Bankinter estiman que concluirá el ejercicio un 2,75%.
La media mensual del índice se ha ido alejando progresivamente del 3% en septiembre, por lo que el ya muy próximo cierre de mes estará por debajo de este valor, algo que no sucede desde noviembre de 2022 y que supone el sexto mes de caídas consecutivas. Y casi dejará obsoletas las previsiones de los expertos.
Desde el comienzo del mes de septiembre, el índice hipotecario ha mostrado una dinámica de descensos que ha llevado a marcar datos diarios que suponen mínimos anuales, como es el caso del dato de hoy, con una caída de 0,082 puntos. Así, la media provisional de este mes de septiembre cae ya al 2,965%.
Las caídas pronunciadas del euríbor, que suponen una muy buena noticia para los hipotecados a tipo variable que tengan que revisar próximamente su cuota a pagar, vienen propiciadas por las expectativas de bajadas en los tipos por parte de los bancos centrales.
De hecho, el BCE y la Fed han bajado tipos durante este mes. Primero lo hizo el banco europeo. Lagarde, presidenta del organismo, anunció una nueva bajada para llevar los tipos del 3,75% al 3,5%, tras la realizada en junio. En segundo lugar, la última reunión de la Fed concluyó el miércoles de esta semana con una bajada de 50 puntos básicos (el equivalente a dos recortes 'simple' de 25pb). Y lo mejor de todo es que para las próximas reuniones, los mercados financieros están descontando intensas bajadas de tipos que pueden acelerar los descensos del euríbor.
Para la reunión de la Reserva Federal del próximo 7 de noviembre ya está sobre la mesa otra bajada de 50 puntos básicos. En el caso del BCE, todavía más influyente en la evolución del euríbor, ya se está comenzando a deslizar un movimiento de parecida envergadura a la de la Fed para la reunión del 12 de diciembre. Los mercados descuentan dos seguidas de 25 puntos básicos.
¿Cómo afecta a mi hipoteca?
Esta tendencia a la baja que está experimentando el euríbor afecta directamente a las revisiones hipotecarias, tanto semestrales como a 12 meses, ya que los bancos recalculan las hipotecas variables con la media mensual, subiendo o bajando en comparación con el dato de seis o doce meses atrás.
Para verlo con un ejemplo, para una hipoteca de 140.000 euros a 30 años (360 meses), con un diferencial del 1% y tomando como referencia el mes de septiembre del año 2023 (ya que la mayoría de hipotecas se revisan a 12 meses), cuando el euríbor cerró al 4,149%, la cuota mensual era de 757,81 euros.
Ahora, con la media provisional de septiembre de 2024, que de momento se sitúa en el 2,965%, la cuota hipotecaria de los propietarios que tengan revisión en septiembre bajará a los 633,55 euros, lo que significa que pagarán 124,26 euros menos que hace un año y se comenzarán a notar las primeras caídas en las cuotas mensuales de los hipotecados.