
El mes de febrero trae consigo retribuciones interesantes en el Viejo Continente. El día 8, la finlandesa Nokia repartirá 0,03 euros por acción, que, en los precios actuales, permiten embolsarse un 1%. La compañía de telecomunicaciones y fabricante de móviles vivió este viernes una jornada de descensos bursátiles, en la que se dejó cerca de un 2,7% en el parqué después de que Barclays iniciase su seguimiento del valor con una recomendación de subponderar. Consulte aquí el Calendario de los próximos dividendos.
El banco la valora en 3 euros, esto es, un 3,5% por debajo de su cotización actual. Más allá del consejo que le otorga esta entidad en concreto, Nokia recibe un mantener por parte del consenso de mercado que recoge FactSet, y un precio objetivo de 3,82 euros, que implica un recorrido al alza cercano al 23%. Le puede interesar: Auge y caída de Nokia, la papelera que se convirtió en el imperio del teléfono móvil.
Nokia suele retribuir cuatro veces al año a sus accionistas (con cuatro dividendos de igual importe en mayo, agosto, noviembre y febrero del año siguiente). El pago del próximo 8 de febrero sería todavía el último correspondiente al ejercicio de 2022. En total, con cargo a dicho ejercicio habrá entregado un total de 0,12 euros. El mercado espera que con sus dividendos con cargo a 2023 su retribución suba un 17%, desde esos 0,12 euros hasta 0,14 euros.
El que recibió Nokia no fue el único golpe que asestó Barclays este viernes. El banco también recomendó deshacerse de las acciones de otra empresa, también nórdica y también del sector de las telecomunicaciones: Ericsson. La entidad justificó esta decisión en sus "poco atractivas valoraciones". La compañía sueca caía un 4% el viernes a media sesión.
Más modesta que la de Nokia es la rentabilidad del dividendo de ASML que, con su entrega del 9 de febrero, ofrece un 0,21%. La empresa neerlandesa fabricante de chips cotiza actualmente en zona de máximos de finales de 2021.