Si el barcelonismo despidió el domingo al actual Camp Nou, el miércoles dará la bienvenida a la financiación que pagará su reforma. El próximo 31 de mayo debutarán en la bolsa de Viena los 1.000 millones de euros en bonos que el FC Barcelona colocó entre una veintena de inversores americanos para afrontar la obra. El conjunto azulgrana tomó la decisión a instancias de sus asesores y en beneficio de los fondos y aseguradoras que, gracias a este movimiento, se ahorrarán las retenciones fiscales cuando se cobren los intereses. Unas tasas, que en todos los casos son superiores al 5,5% que comunicó el club en su momento.
Según la información disponible en la bolsa de Viena, la entidad presidida por Joan Laporta ya lo tiene todo preparado después de que la CNMV diera su visto bueno al fondo de titulización -la sociedad intermedia creada junto a Intermoney- que emitirá la deuda, tras tenerlo en estudio como señaló The Objective. El 31 de mayo será el primer día, aunque no habrá el tradicional toque de campana, pues no será una cotización como tal. De hecho, los fondos podrían comprar y vender los bonos, aunque no estuvieran registrados y comunicarlo al club.
Listarlos es un servicio destinado al inversor, que se rodea de la estructura de un mercado reconocido como el austríaco, lo que siempre dota de mayor seguridad a este tipo de operaciones. Aunque no se conoce la identidad final de los compradores, elEconomista.es ya avanzó que entre los interesados estaban Apollo, Pricoa Private Capital y Voya Financial y las aseguradoras Metlife, New York Life y Barings.
Al listar los bonos, los inversores se ahorran tributar por los intereses en el momento de cobrarlos
No obstante, la principal motivación de este tipo de operaciones es fiscal. Los tenedores de la deuda pueden categorizar el pasivo como un 'activo disponible para la venta' al estar listado, aunque no tenga intención de deshacerse de él. Gracias a ello, se ahorran las retenciones tributarias en los intereses en el momento de cobrarlos.
Precisamente el cupón a pagar fue uno de los grandes quebraderos de cabeza de la actual junta directiva, que se encontró justamente con la subida de tipos del último año como contratiempo a la hora de negociar la financiación. Al contexto macroeconómico se le sumaron el estallido del caso Negreira o las dificultades para inscribir a futbolistas, que encarecieron todavía más la obtención del dinero para el nuevo Camp Nou.
Sin embargo, la entidad aseguró que se consiguió cerrar a un interés bruto del 5,53%. Las cifras del parqué austríaco muestran una realidad muy diferente (ver gráfico adjunto). Ninguno de los ocho programas colocados tiene un coste inferior al 6%. Es más: los mayores paquetes superan el 6,6% e incluso alcanzan el 7%. Por ejemplo: el tramo A3, de 160 millones de euros, se colocó al 7,22% hasta el año 2047. Otro: los tramos A5 (219 millones de dólares) y A6 (239 millones de dólares) se comercializaron con un cupón del 6,98% y 7,06%, respectivamente.

Con los datos de los 1.000 millones en bonos en la mano, la única manera de alcanzar el 5,53% sería haber obtenido unas condiciones muy favorables en los 450 millones en préstamos bancarios, liderados por Goldman Sachs y JP Morgan. Según El Confidencial, el 70% de la deuda tenía un interés superior al 7%.
Pese a estas cifras, el club siempre dijo que se guardó el comodín de refinanciar los 1.060 millones que vencían en los nueve primeros años a la espera de un contexto macroeconómico mejor que rebajara el coste de la deuda. Así esperaba reducir la factura financiera en los próximos años.
El mercado de Viena crece en la industria del fútbol
El FC Barcelona sigue así los pasos de Sixth Street, el fondo que adquirió el 25% de sus derechos televisivos el pasado verano por casi 530 millones de euros. La gestora –que también asesora a la organización en el Espai Barça- emitió en diciembre 305 millones en bonos, que registró precisamente en la bolsa de Viena, un mercado que ha crecido en los últimos años dentro de la industria.
"Las emisiones de bonos están convirtiéndose en una práctica cada vez más habitual en el mundo del fútbol y nos encontramos muy especializados en ella", señala Héctor Mohedano, responsable de emisiones corporativas de la propia Bolsa de Viena. En el pasado, conjuntos como el Inter de Milan, el AC Milan y la AS Roma ya listaron su deuda en este mercado.
En España, compañías como BBVA y OHLA también han utilizado los servicios de la entidad.