
A lo largo de las últimas semanas he venido insistiendo hasta el hartazgo en la imperiosa necesidad de aprovechar las últimas y fortísimas subidas, que llevaron al EuroStoxx 50 Total Return y al CAC 40 galo a alcanzar los altos del año pasado, en lo que califiqué como un desacato, un desmadre y una animalada, para ir recogiendo manzanas o parcialmente beneficios y disminuir de ese modo la exposición a bolsa para reducir riesgos y obtener una preciada liquidez que va a ser la munición necesaria para comprar aprovechando que finalmente ha venido el lobo en forma de susto y corrección en las bolsas europeas.
Hasta me atreví a decir que era de ilusos pensar que las bolsas europeas podían mantener el ritmo de subidas sin que hubiera una corrección intermedia. Pues bien, en esa corrección nos encontramos.
La pérdida de soportes que vimos a comienzos de semana, como eran los que en numerosas ocasiones les insistí que había que vigilar en los 15.180 puntos del DAX o los 4.170 del EuroStoxx 50, nos advierte de que los máximos que marcaron las bolsas europeas hace un par de semanas han sido el techo del amplio movimiento alcista que nació en los mínimos de octubre del año pasado y el punto de origen de una corrección que sabemos cuando empieza, pero no cuando va a terminar.
Un proceso correctivo como el que nos encontramos necesita consumir tiempo o profundizar rápidamente para que se pueda dar por finalizado y las bolsas europeas estén en disposición de retomar su tendencia alcista.

De momento, considero que con apenas transcurridas unas seis sesiones no se puede haber corregido un alza de cinco meses de duración, máxime cuando tampoco la caída ha profundizado ni siquiera hasta los primeros soportes teóricos que representa un ajuste del 38,20% de Fibonacci de toda la subida, que serían niveles de 3.910 en el EuroStoxx 50 o los 8.630 en el Ibex 35. Por tanto, entiendo que es precipitado gastar la munición en forma de liquidez que atesoramos para comprar de un modo contundente. Eso no significa que no se pueda poner un pie en algunas opciones que parezcan interesantes.

Si se fijan les hablo de corrección en las bolsas europeas y no en Wall Street ya que al otro lado del Atlántico, que había quedado parcialmente al margen de las subidas de los últimos cinco meses, entiendo que se mantiene el tono consolidativo que veo como una simple pausa previa a un próximo movimiento alcista que aún podría tener un margen de subida del 10% hasta los objetivos que hace semanas vengo señalando en los máximos de agosto pasado, como son los 13.700/14.000 puntos del Nasdaq 100 y los 4.320/4.400 del S&P 500.
Esta hipótesis alcista solamente se cancelaría si se pierden soportes de 3.760/3.700 en el S&P 500. Mientras eso no suceda soy más comprador que vendedor de renta variable norteamericana.
Por cierto, esta subida al otro lado del Atlántico es la que podría salvar a las bolsas europeas, que podrían optar más por un proceso consolidativo lateral bajista que consuma tiempo que uno en el que se forme una corrección muy profunda, como sería asistir a un ajuste del 61,80/66% de toda la subida desde los mínimos de octubre, que es el riesgo máximo de caída que a priori manejo, esto es niveles de 8.000/8.230 puntos en el Ibex 35 o los 3.650 del EuroStoxx 50, que se encuentran a un 10% de distancia. Iremos encajando las piezas en próximas semanas. Paciencia.
