
Inditex trata de recuperar los 25 euros por acción sobre los que no cierra una sesión desde mediados de agosto. Una barrera que llegó a romper tres meses después ayer, a media jornada, alcanzando los 25,20 euros, pero al final el precio se quedó en los 24,96 euros.
La compañía sigue la tónica positiva de las bolsas este último mes. Desde que empezó noviembre sube un 6,5% y, de batir los niveles vistos en agosto, volvería a tocar precios no vistos desde febrero, cuando se inició la guerra en Ucrania.
En su trayectoria anual sigue dejándose un 10% desde comienzos de año, aunque ya consigue recortar un 10% desde que alcanzó sus mínimos anuales el 18 de mayo, cuando llegó a cotizar por debajo de los 20 euros. Inditex marcó sus máximos anuales justo el primer día de enero, en los 28,66 euros. Para regresar a esa cota aún debería recuperar casi un 15% desde los precios actuales.
La escalada de Inditex no es la única que se está viendo en el sector retail. La semana pasada, previa a la del Black Friday, las cotizadas de esta industria recuperaron un 12% en el parqué. Con ello, los gigantes del sector resucitan en noviembre con Europa a la cabeza, rebotando un 14%, y Wall Street, un 6%.
No obstante, aún acumulan pérdidas mucho más abultadas que las de Inditex, ya que el sector pierde más de un 30% en bolsa, encaminándose al que podría ser su peor año desde 2008. El retail no ha podido escapar este año del contexto inflacionario, obligando a las compañías a subir los precios con el objetivo de blindar sus beneficios anuales, lo que se ha traducido en registrar máximos históricos en sus previsiones de ventas. La inflación también ha oscurecido la voluntad de compra del consumidor, con un poder adquisitivo más deteriorado. Es por eso que otras firmas como H&M han optado por la estrategia de mantener los costes bajos para retener la demanda. Esto no sería suficiente para recuperar los niveles prepandémicos, según las previsiones de FactSet.
En el caso de Inditex, sumándole las ventajas que tiene en su cadena de distribución frente a sus competidoras, Zara se mantiene como la firma más demandada en el sector de la moda, aun manteniendo los precios altos, según indica un informe de Bloomberg.