
El algodón juega un papel crucial en nuestro día a día. Lo podemos encontrar en todo tipo de productos, desde prendas de vestir hasta pañales de bebe, así como en el papel y el cartón. Sin embargo, el clima extremo vivido este año está afectando directamente a su producción, lo que ha disparado su precio hasta un 30% a la vez que ha reducido los márgenes de los proveedores. Mientras los fenómenos meteorológicos adversos provocados por el cambio climático continúan, es cuestión de tiempo que el incremento de los precios se traslade a los consumidores.
En el caso de la India, las cosechas han quedado tan mermadas por las fuertes lluvias y las plagas que el principal país productor de algodón se ha visto obligado a importar suministros. Por su parte, la ola de calor y la sequía que asolan China han hecho que el país tema por el futuro de la producción de este material.
Las altas temperaturas también están afectando a las cosechas de los productores estadounidenses y brasileños, que representan la mitad de las exportaciones mundiales de algodón. En EEUU, la temporada acaba de comenzar y la producción se espera caiga un 28%, el nivel más bajo en más de una década. Mientras, en Brasil, la sequía ha arrasado una oferta estimada en 200.000 toneladas métricas y ha reducido los rendimientos en casi un 30%, según Abrapa, un grupo que representa a los productores. Una situación que ha llevado a los agricultores brasileños a plantearse ampliar sus áreas de cultivo de cara a la próxima temporada hasta llegar a los 1,7 millones de hectáreas.
Asimismo, y aunque parezca contradictorio, las cosechas de algodón que no se han visto arrasadas por las olas de calor, lo han hecho por las lluvias intempestivas. En Australia, Pakistán y Brasil, las fuertes tormentas han reducido la calidad de las existencias, asegura Peter Egli, director de Plexus Cotton.
Todo esto ha obligado a los analistas a cambiar sus previsiones. Si hace unos meses proyectaban una caída de la demanda debido a la desaceleración económica, ahora todo apunta a que la reducción de las cosechas va a disparar el precio del algodón en los próximos meses, según Andy Ryan, director de relaciones de Hedgepoint Global Markets en Nashville, a Bloomberg.