
La serie histórica no miente: si por algo se caracteriza agosto es por ser un mes en el que el volumen de negociación se desploma, predominan los descensos en las principales bolsas mundiales y la volatilidad se suele disparar. El comportamiento del conocido como el índice del miedo, el Vix, no deja lugar a dudas, se apunta un ascenso cercano al 9% en el mes de agosto si se tiene en cuenta la media histórica de los últimos 30 años (ver gráfico).
De hecho, es el mes más alcista del año para el selectivo, por delante de septiembre y febrero según el registro de datos históricos que proporciona Bloomberg. Y es que, según el proveedor de datos, en 18 de los últimos 30 años -un 60% de las veces-, el mes estival por excelencia ha sido alcista para el Vix, lo que le sitúa como uno de los que cuenta con más repeticiones en ese sentido.
Sin embargo, tal y como reza el refranero español, la estadística está para romperse. Y precisamente eso es lo que está haciendo el Vix en lo que va de mes. El índice creado para cuantificar las expectativas del mercado respecto a la volatilidad cotiza por debajo de los niveles en los que terminó en el mes de julio.
Un movimiento que es fiel reflejo de la situación de mercado que se está viviendo en los parqués del planeta, en los que el volumen de negociación se ha visto mermado y en los que los movimientos no dejan ni mucho menos, cambios diarios abruptos. De hecho, en lo que va de agosto únicamente en dos días ha habido variaciones porcentuales superiores al punto porcentual en selectivos de talla mundial como el S&P 500 o nuestro Ibex 35, que sólo suma una sesión con movimientos superiores al 1%.

En Europa es similar la situación que vive el EuroStoxx 50 Volatility Index, desarrollado en base a una nueva metodología que conjuntamente han implementado Deutsche Borse y Goldman Sachs para medir la volatilidad en la zona euro. El indicador, que mide la volatilidad implícita en las opciones con un vencimiento de 30 días está registrando este mes de agosto descensos. Desde Monex Europe apuntan al calendario de datos más reducido para explicar "la volatilidad más moderada" de esta semana pasada, aunque eso sí, no dejan de lado el dato de IPC en Estados Unidos que se publicó el pasado miércoles, ni quitan el ojo a hipotéticos nuevos estallidos de las tensiones geopolíticas.
Agosto tranquilo, ¿otoño volátil?
Desde el departamento de estudios y análisis de Bank of America, por su parte, se hacen eco también de la inusual baja volatilidad en el mercado de renta variable en las últimas fechas y advierten de que en otoño puede cambiar la película, al ser un periodo de mayor volatilidad.
"Esta tendencia puede intensificarse este año en Europa al contemplar un calendario cargado de posibles catalizadores que mueven el mercado, como una crisis energética, una importante incertidumbre política en Italia y riesgos geopolíticos en Europa y China", afirman.
A corto plazo, la inesperada bajada de tipos por parte del Banco Popular de China y algunos de los eventos macroeconómicos que se producirán esta semana pueden provocar un repunte del Vix a corto plazo. Así lo aseguran desde ActivTrades, desde donde señalan que "el índice de sentimiento ZEW de Alemania y los datos del IPC del Reino Unido también pueden favorecer una mayor volatilidad en el mercado" en las próximas sesiones.