
Que una compañía del Nasdaq pierda más de un 40% este año apenas es noticia. Más de 150 firmas del Nasdaq Compuesto se encuentran en esa situación a día de hoy. Pero que lo haga una de las compañías que representaban el modelo de consumo responsable del futuro y algunos la sitúen al borde de la bancarrota en el medio plazo sí es destacable.
Beyond Meat es una empresa alimentaria que crea productos a base de plantas que pretenden sustituir a la carne. Fundada en 2009, en los años siguientes logró financiación privada y visibilidad a través de famosos que destacan por su lucha por la sostenibilidad, como Bill Gates, Leonardo DiCaprio o Jessica Chastain. Pero su momento de gloria llegó en 2019, cuando empezó a cotizar en el Nasdaq y su cotización se disparó.
Sin embargo, la creciente expansión de los productos de la compañía no han conseguido los resultados deseados y ahora podrían enfrentarse a la extinción. Así al menos lo piensan los analistas de New Constructs, que han incluido a Beyond Meat en su lista de "acciones zombis", señalando que la quema constante de capital es insostenible.
David Trainer, consejero delegado de New Constructs, apunta que la empresa "ha errado en generar flujo de caja positivo desde que se hizo pública en 2019", y que ya en 2018 la firma quemó unos 1.000 millones en flujo de caja.
"Beyond Meat debe recortar dramáticamente sus costes y reducir su quema de caja, o irá a la bancarrota", subraya Trainer, que considera que la situación de la firma "pone a los títulos de la compañía en un riesgo significativo de caer a 0 dólares por acción".
Los grandes problemas: inflación y competencia 'animal y vegetal'
En realidad, la compañía ya se ha puesto en marcha en la reducción de costes, empezando por el despido de 40 trabajadores (el 4% de la plantilla) como parte de un plan mayor para "reducir los gastos de funcionamiento y apoyar el crecimiento sostenible", según un memorando interno del consejero delegado, Ethan Brown.
De hecho, la compañía ha presentado esta semana sus resultados del segundo trimestre, y las expectativas distan mucho de ser positivas. "El progreso para nosotros y para el sector está llevando más tiempo del previsto", señalaba Brown en la llamada a los inversores posterior a la presentación de resultados.
En este aspecto, Brown culpa a las "presiones inflacionistas" de la reducción del gasto del consumidor, y a una competencia directa que continúa bajando precios pese al incremento de la inflación, lo que les obliga a competir a nivel de precios reduciendo márgenes.
Así, para la recuperación de la firma, el consejero delegado confía en una mejora general de la situación económica y en el plan de recortes de gasto que incluye la reducción de inventarios y la reorganización de su estructura, junto a la rebaja de costes operativos. A ello se suma la atención en el sabor de sus productos para que "sea indistinguible de la proteína animal", insistir al consumidor en los beneficios para la salud de sus productos y lograr bajar los precios al nivel de lo que cuesta la alternativa de carne animal.
Las cifras hablan por sí solas
Pese al plan presentado por Brown, los resultados del segundo trimestre plasman lo crudo de la situación. Sus pérdidas ascendieron a 97,1 millones de dólares (1,53 dólares por acción frente a los 1,18 dólares que preveía el consenso de Refinitiv), mientras los ingresos se limitaron a 147 millones frente a los 149,2 millones previstos por los expertos, y las ventas netas menguaron un 1,6%.
Pero es que además la propia compañía ha recortado notablemente su previsión de ingresos para el conjunto de 2022, pasando de un rango de 560 - 620 millones que auguraba en el primer trimestre a un rango de 470 - 520 millones en las cuentas presentadas esta semana.
De la gloria bursátil a caer por debajo de la OPV
Beyond Meat debutó el 3 de mayo de 2019 en bolsa, con un precio de salida de 25 dólares por acción, y ese mismo día se disparó un 163% hasta los 65,75 dólares. Su avance fue imparable durante semanas, hasta marcar máximos históricos en los 234,9 dólares el 26 de julio de aquel año, multiplicando casi por 10 su precio de salida en menos de tres meses.
La caída posterior le llevó al entorno de los 75 dólares para cuando terminó 2019, y el 'covid crash' le hizo perder los 60 dólares, aunque en su recuperación volvió a rozar los 200 en octubre de 2020.
Pero los últimos 12 meses han sido un calvario para los títulos de Beyond Meat, con un retroceso de casi un 70%. Y la hemorragia no se frena, puesto que ha llegado a cotizar por debajo de los 25 dólares - y perdiendo por tanto el valor de su debut bursátil - durante buena parte del mes de junio.
Los accionistas que hayan comprado estas últimas semanas sí han visto un jugoso repunte, con una subida del 40% en el último mes (en buena medida impulsado por la subida de doble dígito de este viernes). Cabe preguntarse, por tanto, si lo que surgió como un 'chicharro' se está convirtiendo paulatinamente en una 'acción meme'.