
Que sirva este artículo como homenaje a Benjamin Graham, y a todas las sociedades que se unieron en 1990 para constituir el CFA Institute. Y que desde 1937, se dedicaron a proteger los intereses de inversores, y en mejorar el sistema financiero por todo el mundo.
La mayoría de gestoras de inversión británicas, contratan a licenciados en Historia como analistas, sus responsables conocen de buena tinta, que buena parte del presente está correlacionado con el pasado. Irene Vallejo, escribe en su libro, El infinito en un junco, que el algoritmo de Google ha reemplazado las tarjetas que utilizamos en las bibliotecas para encontrar lo que buscamos. Dice además, que los terminales móviles sustituyen en nuestras manos a los libros para viajar hacia otros lugares. Argumenta Irene, que consumimos aquello que nos ahorra tiempo, para trasladarnos al pasado, es paradójico.
De regreso al pasado, en 1937, con Wall Street aún en shock por el colapso de 1929, nace la NYSSA (the New York Society for Security Analysts). Uno de sus más conocidos patronos fue B. Graham, profesor e inversor. B. Graham perdió casi todo su patrimonio en 1929, y después multiplicó por cuatro el rendimiento del Dow Jones, 1937-1958. ¿Cómo lo hizo? dejar de especular como en un casino, esto le había llevado a la quiebra personal, para analizar la contabilidad de las empresas. El es el Padre del análisis fundamental, su propuesta fue ganando terreno a la especulación, para el beneficio de su propia cartera, la de sus clientes. Probablemente, B. Graham fue el principal valedor del capitalismo, junto a Adam Smith.
De esa semilla que plantó B. Graham en 1937, surgió el programa de estudios de inversión con mayor reconocimiento en la industria financiera. Actualmente, existen más de 160.000 certificados CFA por todo el mundo. El certificado que CFA Institute concede es casi imperativo para la mayoría de firmas de inversión en USA, UK, Canadá, Australia, Irlanda, Suiza, Singapur, Hong Kong.
¿Cuál es la esencia del análisis fundamental de B. Graham? Encontrar el valor intrínseco, la verdad del precio de un activo. Enlazando la filosofía con la inversión, comprendemos que la Ética envuelve a la verdad.
De todos los temas del programa CFA, el que trata sobre la Ética, es el que diferencia al certificado CFA sobre el resto de programas de estudios financieros. El certificado CFA concede entre 10-15% de su temario y evaluación a la Ética. Hay dos principios del código ético que conviene tener en cuenta antes de embarcarse en uno de los retos más exigentes en nuestra vida, si no el que más, 1) promover sin cesar el prestigio de nuestra profesión hacia clientes, compañeros y empleadores, y 2) anteponer los intereses de los inversores sobre los propios.
En otro libro, De Hiroshima a Wall Street, 2009, José Sánchez de Murillo, nos invita a reflexionar sobre la importancia del Humanismo en los negocios, argumenta que la causa de la mayoría de las crisis económicas nace de la falta de empatía de los ejecutivos hacia los empleados, accionistas, clientes y el medio ambiente. Y que sin mayor empatía en las escuelas de negocio, viviremos siempre, de crisis en crisis. Pocos años después de este libro, la inversión socialmente responsable está en pleno apogeo, felizmente.
Según datos de CFA Institute, únicamente uno de cada cinco candidatos consiguen completar el programa. El certificado CFA va más allá del esfuerzo, concentración, el intelecto, un candidato a completar el CFA, debe comprender qué relación tiene el análisis fundamental con la Ética hacia uno mismo, y hacia quienes confiarán en él, o ella. Recalca Carlos Blanco Vázquez, uno de los inversores en startups más reconocidos dentro y fuera de España, que un emprendedor debe conocer bien qué conlleva ser emprendedor.
En este periodo de incertidumbre financiera, es apropiado recordar una cita de W. Buffet, cuando la marea baja, se ve fácilmente quién nadaba desnudo. El análisis fundamental no es solo la mejor herramienta para invertir, también para evitar riesgos.
¿Podría pensar B. Graham que la inversión pasiva es una reminiscencia de la mera especulación que llevó Wall Street al caos en 1929? Parte de su respuesta se encuentra en su biografía. ¿Qué explicaría que dos de los tres principales accionistas de Tesla sean inversores pasivos?