¿A la segunda va la vencida? Tras el colapso de Terra, un criptohiringuito financiero que estalló al ser incapaz de gestionar un ataque bajista, sus creadores han aprobado relanzar el proyecto, con algunos cambios, para ver si esta vez logran que funcione.
El plan aprobado por el equipo de Luna, liderado por el coreano Do Kwon, supone volver a poner en circulación a esta criptomoneda desde cero, mientras que la versión fracasada pasará a conocerse como 'Luna Classic' y, en la práctica, valdrá cero, si es que alguien quiere molestarse en mantener activo el blockchain que la sustenta.
El desmoronamiento de Terra, que perdió todo su valor en apenas cuatro días, supuso uno de los mayores fracasos de la historia de las finanzas descentralizadas y las criptomonedas. Por el camino, miles de inversores han perdido todo lo que depositaron en esta moneda. Especialmente grave es el caso de los que apostaron por UST, una 'stablecoin' atada a Luna y que, en teoría, debería mantener siempre el valor de un dólar. Era una apuesta 'segura', pero acabó siendo igualmente arriesgada y perdió el 93% de su valor en medio del desplome de su hermana mayor. Kwon ha decidido pasar página, y UST ya no formará parte de su estructura.
La mayor pregunta que queda ahora por responder es qué pasó con los 3.200 millones de dólares de reservas
Kwon dijo que los nuevos tokens de Luna se entregarán a los titulares anteriores de Luna y UST, dado que el 'blockchain' actúa como un registro y permite verificar quiénes tenían Lunas en un determinado momento. La propuesta de Kwon fue recibida con críticas por parte de muchos 'mineros' e inversores, que querían que les compensaran las pérdidas que habían sufrido, prácticamente del 100% en muchos casos. El recuento final de los votos sobre dejó un 65% a favor y un 21% de abstención.
La mayor pregunta que queda ahora por responder es qué pasó con los 3.200 millones de dólares de reservas en bitcoins y otras criptomonedas que Kwon había acumulado con las inversiones de sus usuarios, y que había prometido usar para defender la estabilidad de Terra ante los ataques especulativos. El primer día de caídas, Kwon dijo que empezaría a desplegar esa reserva, pero la criptomoneda acabó hundiéndose y la reserva acabó por desaparecer. El problema sigue sin resolverse del todo.