Los astros se habían alineado para que a Prosegur este año le fuera realmente bien ya que el real, que es una de sus principales divisas de referencia, se aprecia ya frente al euro un 19%. La compañía tiene, a través de Cash, una exposición a la moneda latinoamericana de más del 20% (aunque no lo especifican por países).
Pese a que se ha levantado este fortísimo viento de cola, los títulos de Prosegur, lejos de volar, están cotizando en zona de mínimos no vistos desde 2008, por debajo de los 1,82 euros por acción.
Cash supone casi tres cuartas partes del resultado del grupo y dentro de Cash, el 80% depende de las divisas latinoamericanas, siendo un 60% los países más volátiles, entre los que se encuentra Brasil. En julio del año pasado, Antonio Rubio, secretario general de la compañía, explicaba en una entrevista a este medio que "Brasil llevaba dos años desafiando la lógica económica con una inflación bajísima pese a la depreciación de la moneda" y esperaba que "una vez mejorase el tema de la pandemia, las divisas se convertirían en un viento de cola y no de frente".
En los últimos resultados "se ha visto una recuperación notable de la actividad en las principales áreas de negocio, recuperando Cash la rentabilidad previa a la pandemia y mostrando un gran margen de mejora en el segmento de la seguridad", explican en Renta 4.
Con este escenario que se abre y, después de las fuertes caídas en bolsa que acumula en los últimos años, el potencial que los analistas le dan a sus títulos ya se acerca al 80%. Y es que los analistas no han rebajado prácticamente sus valoraciones en los últimos meses, con un precio objetivo medio que se mantiene por encima de los 3,4 euros.

De igual forma, recibe una de las mejores recomendaciones de la bolsa española, con tres de cada cuatro analistas aconsejando tomar posiciones y ninguno sugiriendo deshacerlas.
En el caso de Cash, en bolsa está plana durante 2022 y los expertos le conceden un recorrido medio al alza del 117% desde los niveles actuales.