
Es muy socorrido utilizar los mercados como una bola de cristal para predecir el futuro, pero realmente si lo tuviéramos que utilizar para evaluar algo esto sería el presente más inmediato. Tan inmediato como que cuando se lea esto puede haber quedado todo desfasado. Los mercados ahora están comprando que la guerra entre Ucrania y Rusia no va a más, o al menos se mantiene una calma tácita entre los dos frentes, lo cual no es ninguna victoria pero tampoco es el peor de los escenarios que sí se temieron cuando comenzó la semana y que el jueves volvieron a sobrevolar.
Mientras esto no cambie, lo cual puede suceder en cualquier momento teniendo en cuenta los precedentes, las bolsas, el petróleo y la deuda serán el gran termómetro de la situación. Esta semana finalmente Europa ha cerrado con descensos que han rondado el 2%. Algo más acusadas han sido las caídas en el Ibex, del 2,5% aproximadamente, pero que lo mantienen como el mejor índice en el año de la eurozona.
La situación técnica es de calma, por ahora, ya que se mantienen vigentes los soportes que se marcaron a comienzo de semana pero es cierto que, de perderse, se abriría la puerta a caídas del 10%, según explica Joan cabrero, asesor de Ecotrader.
El EuroStoxx 50, de referencia en Europa, se quedó ayer a un 2,5% de su soporte clave de corto/medio plazo, como son los 4.000 puntos, el Dax se quedó a un 3% y el S&P 500, más alejado, a casi un 5% de sus respectivos niveles de alerta. "Estos soportes se han visto reforzados esta semana como la línea divisoria que separa lo que hasta el momento parece ser una consolidación previa a mayores alzas de una corrección en toda regla, en la que cabría esperar caídas que incluso podrían ser del 10%", explica el experto.
"El rebote que vimos en las sesiones anteriores a la de este jueves alejaron a los índices de esos soportes clave que, en el caso del Ibex pasan por los 8.500 puntos; mientras estos soportes se mantengan en pie no sería partidario de reducir exposición a bolsa europea", agrega Cabrero.
Aunque todos los focos ahora estén puestos en la frontera oriental de Ucrania, no hay que olvidar la que ha sido la principal preocupación de las últimas semanas para el mercado, que es la inminente subida de tipos que los grandes bancos centrales se ven en la obligación de abordar y, para eso, marzo será un mes clave, con sendas reuniones de la Fed y del BCE.
Aun así, después de las fuertes ventas que ha habido de deuda soberana desde hace semanas, los inversores han vuelto a resguardarse del posible susto en la deuda soberana más segura. Así, todas las principales referencias mundiales han acabado con compras netas después de tocar máximos la semana previa. En el caso del Bund alemán, que llegó al 0,3%, ahora se le exige un rendimiento del 0,22%, elevando la prima de riesgo periférica y dejando la española en los 99 puntos.
Volviendo a la bolsa, las mayores pérdidas esta semana en Europa las han protagonizado el sector bancario y el turístico, precisamente dos de los que mejor evolución habían tenido hasta le fecha, en plena recuperación. En lo que respecta al Ibex, Bankinter y Mapfre se llevan los mayores golpes, con pérdidas del 4%. Por el contrario, Rovi ha cosechado más de un 6% desde el lunes tras anunciar una prolongación del contrato con Moderna y la aprobación de su medicamento contra la esquizofrenia. También Ferrovial se ha anotado más de un 2% impulsado por su propuesta de compra de una parte del aeropuerto JFK de Nueva York y el de Dalaman en Turquía. La presentación de resultados se intensifica esta próxima semana.
Rebote en materias primas
Además de en las bolsas y en la deuda, la tensión entre Ucrania y Rusia tiene un efecto directo en los precios de las materias primas. La primera, por descontado, en el oro, donde los inversores han buscado refugio a la incertidumbre y han llevado a su precio a tocar esta semana máximos desde junio en los 1.900 dólares por onza. Pero también, como es lógico, el petróleo, de la que Rusia es uno de los principales productores mundiales. El barril de Brent, que ya venía cotizando fuertes subidas en los últimos meses por la sobredemanda en el mercado, ha caída esta semana, a media sesión del viernes, algo más de un 1%, quedándose en el entorno de los 93,5 dólares por unidad.