
Un año de volatilidad en el que se deben aprovechar los movimientos del mercado para ir rotando la cartera tácticamente. Es el planteamiento esquemático para los próximos meses de Mutuactivos, la octava mayor gestora española de fondos de inversión por volumen patrimonial, con algo más de 8.600 millones de euros.
Y en un semestre que va a estar marcado por el inicio de subida de tipos de interés en Estados Unidos para contener la inflación y su efecto en el crecimiento, en la gestora del grupo Mutua consideran que es mejor mantenerse neutral en renta variable, con una equiponderación entre los valores de crecimiento y los más cíclicos, o lo que es lo mismo entre EEUU y Europa, mientras que sí sobreponderan los mercados emergentes, especialmente China, y Japón por sus valoraciones más atractivas.
Por sectores, este planteamiento les hace mostrarse más positivos con entidades financieras como BNP Paribas, aseguradoras como Hannover Re, hoteleras como Accor, aerolíneas como IAG, inmobiliarias como Merlin, firmas de servicios de restauración como Compass, gestores de reservas como Amadeus y petroleras, aunque en este segmento no especificaron nombres durante la presentación trimestral. Dentro de los valores denominados de crecimiento, sus apuestas son tecnológicas como Meta y Alphabet, la compañía de medios de pago Mastercard y Linde, Plug Power, Iberdrola y Solaria dentro de las firmas relacionadas con la transición energética.
Dolz aseguró que lo peor del efecto de la subida del rendimiento de los bonos ya ha pasado
"No apostamos claramente por un sector porque hay que aprovecharse de la rotación sectorial, que va a continuar, en un entorno de mucha volatilidad", señaló Ignacio Dolz de Espejo, director de soluciones de inversión y producto de Mutuactivos, para quien pese a que la renta variable cotiza a múltiplos elevados en términos absolutos, "siendo siendo atractiva".
En la parte de renta fija, Dolz aseguró que lo peor del efecto de la subida del rendimiento de los bonos ya ha pasado y considera que el crédito empieza a estar atractivo, aunque prefieren esperar a que los diferenciales de los bonos de high yield o alta rentabilidad suban para elevar sus posiciones, aprovechando el 20% de liquidez que todavía mantienen en cartera.