
El equipo de estrategas de Bank of America, abanderado por Ohsung Kwon, advierte en una nota distribuida entre sus clientes sobre las inquietantes similitudes entre el contexto actual y el que hace tres años llevó a una rápida caída del mercado del 20%.
Kwon estima que las alarmantes y débiles proyecciones de beneficio del tercer trimestre de las compañías patrias "son el canario en la mina de carbón", donde también destaca una Reserva Federal que cada vez se postula como más agresiva. De esta forma, si la historia se repite, a los inversores les espera una desagradable caída.
"La referencia más cercana del potencial impacto se traslada a hace casi tres años, cuando las compañías advirtieron sobre el impacto de los aranceles y la desaceleración de las condiciones macro en la presentación de sus resultados del tercer trimestre de 2018", determina Kwon. "Esas advertencias y una Fed más agresiva resultaron en una caída del 20% en el S&P 500", añade.
Si se materializa, un retroceso a finales de 2021 puede estar precedido por advertencias similares a las ya ocurridas en 2018, aunque actualmente la coyuntura macroeconómica sea bastante diferente.
La incertidumbre geopolítica provocada por la escalada del conflicto comercial entre Washington y Pekín condujo a una venta masiva del mercado de valores en 2018. El S&P 500 volvió a subir al año siguiente, registrando una rentabilidad del 33% (dividendos incluidos), pero la mejora de los fundamentos no impulsó este movimiento.
Tres años después, las relaciones entre EEUU y China siguen siendo tensas pero la mayor fuente de problemas en la cadena de suministro no son fruto de un conflicto comercial sino de la pandemia. Por otra parte, la intención de la Reserva Federal de dar marcha atrás en sus estímulos llega después de haber duplicado su balance a través de las compras de deuda en el último año.
Caída brusca
Dicho esto, el ratio de orientación de Bank of America, que mide las expectativas de beneficios futuros de las empresas en comparación con el consenso, ha caído bruscamente desde un máximo histórico, aunque sigue siendo relativamente alto. Las estimaciones del consenso para 2021 también se han estabilizado.
Cuatro compañías concretas han dado señales de que se avecinan problemas a medida que aumenta la preocupación por la inflación y la variante Delta: PPG Industries, Sherwin-Williams, PulteGroup y 3M Company. Estas empresas constituyen una pequeña porción del mercado en general, pero son indicadores fiables del próximo ciclo de beneficios, según Bank of America.
Para Kwon, los analistas suelen ser demasiado optimistas en cuanto a las estimaciones de beneficios futuros y las revisiones de los beneficios para 2022 están siendo contundentes. Esto deja margen para una mayor decepción en el mercado si los informes de presentación de resultados no son satisfactorios y los márgenes se ven bajo presión.