China continúa dando pasos adelante en su cruzada contra los monopolios tecnológicos del país. Ayer presentó un borrador con una lista de nuevas medidas que el Gobierno está preparando, una publicación que los inversores no se tomaron nada bien y desembocó en otro día en rojo para las empresas del sector, que ya pierden más de un 43% desde que sus cotizaciones tocaron máximos del año el pasado mes de febrero.
En el documento que presentaron las autoridades del país se incluyen algunas medidas que hasta ahora no estaban sobre la mesa, y que parecen destinadas a intentar fomentar una competición más sana entre los grandes monopolios tecnológicos.
Entre ellas, por ejemplo, se encuentran regulaciones para fortalecer la protección de la propiedad intelectual, la reputación de las distintas marcas que operan en el mercado digital y la prohibición de usar ciertos algoritmos, especialmente aquellos destinados a la publicidad.
También se controlará y vetará la publicación de reseñas falsas en los sitios de venta online para publicitar los productos que están a la venta. El regulador estaría evaluando la opinión pública de estas nuevas medidas hasta el 15 de septiembre, antes de que entren en vigor.
Pekín parece tener claro que el universo de las empresas digitales tiene que cambiar algunas prácticas. En el nuevo borrador se incluyen prohibiciones a algunos procedimientos, como los acuerdos de colaboración forzosos, o el uso de técnicas por parte de las compañías para interferir las operaciones de las plataformas rivales.
Esto, según se explica desde Bloomberg, es una práctica que llevan a cabo grandes gigantes del sector como Tencent o Alibaba, que hacen incompatibles algunos servicios de compañías rivales si se están utilizando sus plataformas.
Esto recuerda a la polémica que ha habido en los últimos años en Estados Unidos, cuando el regulador norteamericano terminó, en 2018, con el principio de neutralidad en la red. Bajo la nueva normativa, por ejemplo, un proveedor de servicios de comunicación, como puede ser Verizon o AT&T, por ejemplo, podría bloquear a sus clientes el acceso al portal web de un competidor, para intentar evitar que este pudiese contratar sus servicios. Este tipo de prácticas son las que China estaría pensando vetar, según el borrador que se ha presentado.
Pekín parece haber decidido arrimar el hombro en aspectos de regulación durante este verano. Aunque es cierto que las medidas antimonopolio ya llevan varios meses aumentando de intensidad en el gigante asiático, con la multa histórica que se impuso a Alibaba en abril de 2021, o la prohibición por parte del Gobierno de que los ciudadanos chinos puedan descargar la aplicación de Didi Chuxing, el Uber chino, después de que esta firma decidiese salir a bolsa en Estados Unidos (en contra de las preferencias del regulador chino), lo cierto es que en verano el gobierno chino ha pisado el acelerador en las cuestiones de la regulación a los monopolios tecnológicos.
El verano de la regulación
A través de sus medios de comunicación estatales, China ha ido dejando pistas de sus intenciones. Algunas de las medidas que estaría barajando el gobierno están relacionadas con el mayor control al sector de los videojuegos, que ha sido calificando como "opio espiritual" en las publicaciones de los medios, además de nuevas normas para el big data o la inteligencia artificial.
En la práctica, y lo que parecen estar temiendo los inversores, es que China puede regular cualquier sector en el futuro. De hecho, una de las intenciones del gobierno que destacaron los medios estatales, según Bloomberg, apuntan a medidas para asegurar "el interés de seguridad nacional", dentro del cual es de suponer que el gobierno podría justificar cualquier regulación.
Un duro castigo en bolsa
Las empresas chinas más relacionadas con el nuevo mundo digital son las que más están sufriendo en bolsa el control del gobierno. En lo que va de año, el subíndice de firmas tecnológicas Hang Seng Tech Index ya pierde más de un 26%, un descenso que supera el 43% desde los máximos del año.
Dentro del subsector, que recoge 30 compañías tecnológicas, las mayores pérdidas anuales son las que acumulan Koolearn Technology, del sector de la educación, con más de un 85% de caída en el año. Las ramas del sector salud de JD.Com y Alibaba son las siguientes que más caen, con pérdidas del 52,8% y 48,6%, respectivamente, y en la lista se encuentran otras firmas directamente afectadas por las nuevas regulaciones, como es el caso de Kingsoft, empresa desarrolladora de videojuegos y también de softwares para otras aplicaciones, como la ciberseguridad, una compañía que cae casi un 30% en el conjunto del año.