Son las sicavs en las que más se suelen fijar el resto de inversores, entre las 2.346 sociedades que todavía resisten, según los datos de Morningstar, ya que la mayoría son algunas de las sociedades con mayor volumen patrimonial, entre las pertenecientes a las grandes fortunas. De ahí que no pasen desapercibidas su estrategia, su rendimiento y cuáles son las ideas de inversión que incorporan en sus carteras.
Desde las fuertes caídas que comenzaron a mediados de febrero del año pasado, en lo que se denominó el Covidcrash, la sicav que ha salido más fortalecida ha sido Lierde, la sociedad perteneciente a la familia Alierta, que ha conseguido una rentabilidad del 14,18%, un rendimiento del que se han beneficiado sus 828 accionistas –es la única sociedad de los grandes patrimonios que permite beneficiarse de la traspasabilidad entre sicavs y fondos de inversión, al contar con más de 500 accionistas–.
No solo es la que más se ha recuperado después de la caída de casi el 31% que acumulaba a finales de marzo del año pasado, sino que es la sociedad más rentable en 2021, con datos hasta el 6 de agosto de Morningstar, entre las 18 que son traspasables a día de hoy, al proporcionar un 26,27%.
Lierde Sicav está gestionada por Juan Uguet de Resayre, sobrino del expresidente de Telefónica, y Francisco Tajada a través de la gestora Augustus Capital Asset Management, de la que un tercio pertenece desde el año pasado al family office suizo Preon Capital. Lierde, con 163 millones de euros de patrimonio, es una de las sicavs más antiguas del mercado, con casi 30 años de recorrido, y a pesar de ser el vehículo de inversión de los Alierta, la familia no cuenta con un porcentaje significativo de la sociedad, según los datos de la CNMV.
Según el último informe trimestral, los gestores explicaban que habían entrado en la compañía norteamericana Salesforce, em Digital Value y el bróker europeo FlatexDegiro, mientras que habían deshecho la posición en Adidas y STO SE, el fabricante de aislamientos térmicos para fachadas. Entre las empresas españolas en las que invierten figuran Neinor, Quabit, Realia, Merlin Properties y Grifols.
El resto de sociedades de inversión de capital varible de las grandes fortunas españolas que más se han recuperado desde el Covidcrash son Arbarin y La Muza, con una revalorización del 13,75% y del 13,19% desde el pasado 19 de febrero, respectivamente, seguidas de Soixa e Inversiones Naira, con un 12,30% y un 11,08%.
Arbarin, perteneciente a Anna Isabel Gamazo, esposa del empresario Juan Abelló, es junto a La Muza una de las sociedades que más se revalorizan también este año, con un rendimiento del 22,83% y del 24,72%, respectivamente. La sociedad de Gamazo cuenta con su propia gestora, Arbarin SGICC, bajo el paraguas del grupo Santander, y gestiona 247 millones de euros.
La Muza, por su parte, se encarga de la gestión de parte de la fortuna de la familia Urquijo, que fundó el banco homónimo a finales del siglo XIX. Cuentan desde hace tres años con su propia gestora también, Muza Gestión de Activos, que tiene a Luis Urquijo como consejero delegado y director de inversiones y a su hermano Estanislao como presidente de la firma. Y entre su oferta figura un fondo que replica el comportamiento de la sicav.
En La Muza son unos convencidos del value investing y entre las principales posiciones de la sicav aparecen firmas como Atalaya Mining, Qualitas, IPCO, Sacyr, Indra y Dominion.
Las que peor se comportan
No todas las grandes fortunas han tenido tanta suerte a la hora de que sus vehículos de inversión se recuperen de las fuertes caídas del año pasado. Entre las que peor se han comportado se encuentra una de las sicavs más conocidas y una de las que más patrimonio acumula, (577 millones de euros), Morinvest, de la empresaria Alicia Koplowitz, que solo gana un 5,77% desde febrero del año pasado.
Le siguen en peor rentabilidad, entre el grupo de sicavs de las grandes fortunas, Allocation, de los del Pino –que también cuentan con su propia gestora, Pactio Gestión–, con un 5,60%, y Soandres, de la hija mayor del fundador de Inditex, Sandra Ortega, que se anota un 4,75%. Peor suerte han tenido Cartera Kefren y Kalyani, del millonario de origen indio Ram Bhavnani, que tan solo proporcionan un 2,91% y un 0,83%, respectivamente.