
La bolsa disfrutó ayer de una auténtica fiesta bursátil. Vivió su mayor subida en dos meses a pesar de que el dólar sigue de capa caída frente al euro y el petróleo vuelve a colocarse en el entorno de los 63 dólares por barril Brent. Sin embargo, esta mañana se impone la reflexión y la calma: el Ibex 35 apenas se mueve.
La decisión y la seguridad de ayer, cuando el dinero fresco llegaba a chorros a la bolsa española gracias sobre todo al sector constructor, han dado paso a las dudas en los primeros compases de la mañana. No hay que olvidar -como recuerda Link Securities en su informe diario- que los fantasmas en los mercados de divisas y petróleo siguen presentes, lo que, más tarde o más temprano, puede tener su repercusión en la renta variable.
La sesión de hoy se dilucidará –al menos eso espera una buena parte de los ahorradores- a partir de las 14.30 (hora española), cuando se conocerán varias referencias macroeconómicas de importancia en Estados Unidos, como el gasto y el ingreso personales, el deflactor PCE (uno de los índices más tenidos en cuenta por la Reserva Federal para medir la evolución de los precios) o las peticiones iniciales de subsidios de desempleo.
Eso sí, hay algunos valores que no se detienen, como Sacyr Vallehermoso (SYV.MC) que capitanea con toda suficiencia las alzas del Ibex 35 pese a haber sido la estrella rutilante de ayer al dispararse más de un 7% tras conocerse que ya controla el 20% de Repsol. Y no es la única constructora que sigue de fiesta. FCC (FCC.MC) también ostenta un puesto en las primeras posiciones del selectivo.
Por su parte, Iberdrola (IBE.MC) se recupera del mal trago que vivió durante las sesiones previas a su oferta por Scottish Power e Iberia (IBLA.MC) no se resigna a caer aunque el precio del petróleo haya vuelto a la carga. Con todo, la chispa de las compras no acaba de prender en el mercado. Y es que hay varios obstáculos en el camino, como las caídas de pesos pesados como Telefónica (TEF.MC) o Repsol (REP.MC). Además, BBVA (BBVA.MC) y Santander (SAN.MC), aunque se resisten a caer en los números rojos, tampoco son capaces de tirar los suficiente para modificar la situación global.
Como premio de consolación, los inversores pueden mirar al resto de Europa, donde la coyuntura es tanto o más confusa que en España. París se deja llevar por las órdenes de venta al retroceder un mínimo 0,1%, mientras que Londres está sumido en la más completa parálisis y Francfort se deja seducir, aunque por muy poco, por los números negros. Por valores, son las petroleras las que se llevan el premio, salvo Repsol. Eni, Total se colocan en las primeras posiciones del EuroStoxx 50 con alzas que se acercan al 1%.
Y una buena parte de la culpa del comportamiento de los valores relacionados con el oro negro la tiene los futuros del petróleo. Aunque esta mañana el barril Brent baja un leve 0,3%, hasta 62,86 dólares, aún está muy presente la escalada de ayer cuando se disparó más de un 3% tras conocerse el dato de reservas de crudo al otro lado del Atlántico. Por último, el euro sigue dando pasos frente al dólar. Suma un 0,3%, hasta las 1,3189 unidades del billete verde, y se mantiene por lo tanto en sus máximos de 20 meses.