
Cada vez que Berkshire Hathaway (BH), el conglomerado que dirige Warren Buffett, invierte en una nueva empresa, todas las miradas -y las compras bursátiles- suelen dirigirse hacia ella. Pero la atención es aún mayor si su identidad lleva tres meses en secreto. Y las expectativas del mercado son que el nombre sea por fin revelado en la presentación programada para este martes, en la que BH informará de sus inversiones a fecha de 31 de diciembre.
El pasado mes de noviembre, cuando BH hizo su última presentación, informó de que había realizado una compra, pero que "la había notificado por separado ante la Comisión de Bolsa y Valores" de EEUU, en vez de incluirla en la documentación pública de la compañía. La última vez que hizo algo así fue en 2015, cuando amplió su tenencia de acciones en la petrolera Phillips 66.
Este mecanismo tiene como principal objetivo evitar que el anuncio provoque cambios bruscos de precio en las acciones y ponga en peligro las operaciones, algo especialmente importante para un conglomerado de la fama y potencia de BH. Desde que se conoció la compra, los rumores han inundado el mercado, con Disney, Paypal, Alphabet (Google), Exxon o Chevron entre los favoritos.
De todas formas, Buffett no estaría obligado a revelar sus cartas antes de que lo considere oportuno. Pero el sello de aprobación que suele suponer una compra por parte de BH tiene a los inversores intentando descubrir la identidad de la empresa misteriosa. La inversión podría ser de entre 5.000 y 10.000 millones de dólares, una buena apuesta.