
Este viernes 12 de febrero se celebra el nuevo año chino. El protagonista de este 2021 según su horóscopo será el buey pero ¿qué pasará con el país asiático después de haber salido como el gran vencedor de la crisis del coronavirus?. La economía China fue la primera que sufrió la pandemia, sin embargo, consiguió salir de ella con asombrosa rapidez, la economía del país es la única creció en el 2020, se expandió un 2,3% consolidándose así como una de las grandes potencias a nivel mundial y ganando ventaja frente a su principal rival: Estados Unidos.
Dimitrios Nteventzis, gestor del MainFirst Emerging Markets Corporate Bond Fund Balanced, asegura que para 2021 espera que continúe el fortalecimiento de la economía con un alza del PIB por encima del 8%, crecimiento que prevé que será impulsado por una rotación desde las inversiones y la producción hacia el consumo interno, que volverá a ser el motor de la economía.
El experto asegura que "una economía china fuerte es un viento de cola para las materias primas y los mercados emergentes". China ha demostrado ser un mercado fundamental para los emergentes, además, la fuerte recuperación en 2020 ofreció un mayor apoyo a estas economías que se encuentran aún gravemente afectadas por la crisis. Según Dimitrios, la fuerte demanda china de materias primas en 2021, combinada con un mayor estímulo fiscal en EEUU y una subinversión crónica en el lado de la oferta, crean un mercado alcista estructural para las materias primas que será un viento de cola para los mercados emergentes.
"Una economía china fuerte es un viento de cola para las materias primas y los mercados emergentes"
Otro de los aspectos que destaca el experto para la economía china de cara a este año es que la retirada de estímulos será gradual. Los responsables políticos chinos ya pusieron de manifiesto un entorno menos acomodaticio en el futuro, lo que en parte trajo malos recuerdos a algunos inversores sobre el ciclo anterior de 2014 y 2015, cuando un levantamiento de las políticas expansivas provocó un aumento de la volatilidad en los mercados de crédito y una presión sobre aquellos más dependientes del crédito. Sin embargo, Dimitrios aseguró que "los recientes indicios de una reducción moderada son positivos para el largo plazo y ponen de manifiesto el compromiso de los responsables políticos de promover la estabilidad financiera en lugar de seguir una estrategia de crecimiento a cualquier precio".
Por otra parte, el experto asegura que la reciente volatilidad ha creado interesantes oportunidades de inversión para los inversores en crédito. "Actualmente, el segmento high yield de China parece muy atractivo en comparación con el resto de mercados emergentes, con métricas de valoración de diferenciales relativos en el punto más alto desde 2012", afirma el experto.
Por otra parte, Dimitrios destaca que el sector inmobiliario sigue siendo atractivo: "aunque vemos una desaceleración en el sector inmobiliario, creemos que será muy modesta. El sector inmobiliario sigue siendo una parte integral de la economía china y un sector muy regulado, lo que permite un ajuste a nivel provincial". El experto también declara que hay oportunidades atractivas en los bonos de corto plazo de las empresas industriales "Nos gusta especialmente Anton Oil, una empresa de servicios petrolíferos centrada en China, un productor de energías renovables".
Por último, el especialista recalca que el 2021 será un año para los gestores activos y la selección de créditos. "Aunque 2020 resultó ser un año mucho mejor de lo que se esperaba inicialmente, los movimientos de los valores se vieron impulsados en gran medida por el sentimiento general de risk-on/risk-off más que por la evolución de nombres específicos. Con la normalización de los mercados creemos que la selección de créditos y la gestión activa volverán a ser el componente clave de generación de alfa", concluye Dimitrios.