
Coincidiendo con el confinamiento y la recuperación de la bolsa americana, la inversión de pequeños ahorradores vive un boom sin precedentes en las últimas décadas. Plataformas como Robinhood, que no aplican comisiones a sus usuarios, han facilitado la entrada al mercado bursátil de una generación nueva de particulares. Mientras los expertos deciden si son responsables de la vertiginosa remontada de Wall Street, están ganando la partida a grandes gurús del mercado como Warren Buffett o Carl Icahn con descaro y con apuestas arriesgadas.
Las reglas del juego pueden cambiar en la bolsa americana. Un ejército de pequeños inversores está echando un pulso a las manos fuertes del mercado, hedge funds y bancos de inversión. Para algunos expertos los grandes responsables de la recuperación fulgurante del mercado americano son ellos. Desde los mínimos de marzo, los principales índices de Wall Street han despuntado entre un 30% y un 40%, con una descorrelación histórica con la previsión de crecimiento de beneficios. Con el confinamiento, la operativa de minoristas se ha disparado y han entrado en el mercado con posiciones alcistas tras el descalabro sufrido por la bolsa entre abril y marzo.
"La participación minorista está en niveles que no hemos visto en 20 años", apunta Benn Eifert, socio gerente de QVR Advisors , y eso para muchos operadores veteranos solo es sinónimo de época de turbulencias. En Wall Street, las crisis dejan muescas en la memoria de los traders y la situación actual recuerda la burbuja de las puntocom. Acciones disparadas sin motivo alguno y miles de inversores corriendo detrás de ellas.
En este tiempo se han vivido episodios sorprendentes. Fangdd Network, una pequeña inmobiliaria china que cotiza en el Nasdaq enloqueció de la noche a la mañana. Sus acciones se multiplicaron por 13 y alcanzó una capitalización de 4.000 millones de dólares, en mitad de un vacío absoluto de noticias que explicaran tal movimiento. Según Bloomberg, la razón más plausible es que los inversores asociaran su nombre al acrónimo de las FAANG, como se conoce a los gigantes de internet de EEUU (Facebook, Apple, Amazon, Netflix y Google). Las tecnológicas lideraron la remontada bursátil y plataformas de inversión para pequeños inversores hicieron el resto para disparar acciones. También ha sucedido con Nicola Corp, el fabricante de furgonetas eléctricas, que todavía no ha vendido una unidad.

"El comportamiento más especulativo está generando movimientos extraños en el mercado", comenta Eifert y apunta a Robinhood como el origen de las posiciones más agresivas. Robinhood, la aplicación de inversión sin comisiones que se está convirtiendo en el acceso más popular al mercado entre los millennials. Más de 15.000 de usuarios de la red agregaron acciones a sus carteras de Fangdd Network.
Este boom de la bolsa entre inversores jóvenes se ha producido en paralelo al cierre temporal de las grandes ligas deportivas, donde se mueven miles de millones de dólares. El ejemplo de David Portnoy, una celebrity de internet ligada al mundo del deporte, es una clara señal de que algo está pasando. El bloguero no para en Twitter de promocionar sus inversiones bursátiles.
Los chats de las plataformas de información, tarifas cada vez más baratas para invertir y acciones desconocidas y con poca trayectoria disparadas suena muy familiar en Wall Street. Las comparaciones con la burbuja de las puntocom son evidentes. Y los inversores más veteranos tienen muy presente cómo terminó esa crisis bursátil. El mercado bajista duró dos años y redujo a la mitad la capitalización de la bolsa americana.
Curiosamente, el mercado americano nunca ha estado tan caro desde hace casi veinte años, coincidiendo con el estallido de la burbuja tecnológica. La caída del pasado jueves puede ser un aviso de que las apuestas alcistas han ido demasiado lejos, pero por ahora los pequeños inversores van ganando. Incluso están derrotando a los factotum del mercado como Warren Buffett o Carl Icahn con descaro. Portnoy ha llegado a escribir en la red social que Buffett está "desfasado".
I'm sure Warren Buffett is a great guy but when it comes to stocks he's washed up. I'm the captain now. #DDTG pic.twitter.com/WqMR89c7kt
— Dave Portnoy (@stoolpresidente) June 9, 2020
El oráculo de Omaha sufrió un duro golpe por el coronavirus debido a sus inversiones en las grandes aerolíneas de EEUU. Berkshire Hathaway liquidó totalmente sus participaciones en el sector durante el crash. En mayo cuando se conoció el movimiento. Los usuarios de Robinhood entraron con fuerza en estas compañías. Casi 40.000 inversores tienen en cartera el ETF Global Jets, con posiciones en todo el sector, según Robintrack, una aplicación que permite seguir los movimientos de los usuarios de Robinhood.
Otro ejemplo es Hertz. La compañía de renting se ha disparado casi un 600% solo semanas después de declararse en quiebra. El volumen de negociación de las acciones de Hertz aumentó en junio, 63 veces más de lo habitual respecto a 2019, mientras el número de usuarios de Robinhood que poseían las acciones aumentó a 160.000. Icahn era uno de los accionistas más conocidos de la compañía y liquidó sus posición a 0,72 dólares tras encajar pérdidas de 1.800 millones. Hertz ahora roza los dos dólares el título, tras tocar mínimos de 0,56 dólares.

"Definitivamente son señales de burbuja", comenta Matt Maley, estratega jefe de mercado de Miller Tabak. "La gente decide hacer apuestas, no invertir, a pesar de que no saben nada sobre el mercado de valores". Pero la jugada entra dentro de la lógica inversora en los momentos que corren. La Reserva Federal ha prometido tipos bajos hasta por lo menos 2023. Las principales posiciones se han abierto en compañías que fueron muy vapuleadas entre febrero y marzo. Disney, aerolíneas o cruceros. Pero también hay posiciones muy especulativas esperando grandes retornos como General Electric o Aurora Cannabis.
"Los inversores están viendo de primera mano la emoción de la victoria, la agonía de la derrota, y lo está haciendo con grandes sumas de dinero, así que creo que para los inversores más jóvenes es realmente atractivo", apunta Nate Geraci, presidente de la firma de asesoría de inversiones ETF Store. El crecimiento de la participación de los inversores minoritarios ha sido claro. Las operaciones con cuentas pequeñas de menos de 2.000 dólares suponen un 2,3% del total del mercado, en comparación con el 1,5% de principios de año, según muestran los datos recopilados por Goldman Sachs. Una tendencia similar también se ha dado en el mercado de opciones, elevando la participación al 13% desde aproximadamente el 9%.
Sin apuestas deportivas en EEUU disponibles, la bolsa se ha convertido en el casino para muchos jóvenes
Robinhood ha registrado más de tres millones de cuentas nuevas en los primeros cuatro meses de 2020, y la mitad de los clientes que abrieron cuentas este año dijeron que invertían por primera vez. Entre los expertos hay división de opiniones de si este boom entre los millenials está teniendo un impacto real en la remontada. Los analistas de Barclays están cuestionando esta narrativa. Al comparar las tenencias de los usuarios de Robinhood con los rendimientos diarios de las acciones de las compañías S&P 500, han descubierto que la mayoría de flujos de entrada se ha producido en compañías que han tenido un peor rendimiento en las últimas semanas.
Sin embargo, el análisis no está teniendo en cuenta el precio de las acciones. Para la firma Bespoke es importante tener en cuenta que los títulos con un menor precio suelen ser más atractivos para el inversor minorista. La casa de análisis ha analizado el grupo de compañías más baratas del Russell 3000. Descubrieron que la participación promedio con un precio en el decil inferior en octubre ha aumentado más del 15% desde entonces, lo que sugiere que los jugadores "pequeños y activos están desempeñando un papel en los flujos y el rendimiento del mercado a medida que buscan acciones como si jugaran a la lotería".