
Si cuando arrancó el año los expertos esperaban que en 2019 la firma italiana Leonardo, dedicada a principalmente al sector de defensa, ganase unos 500 millones de euros, ahora la previsión es que logre 620 millones, lo que implica una mejora del 23%. Si lo consigue, la empresa, que forma parte del Tressis Cartera Eco30, el fondo asesorado por elEconomista, marcará un récord histórico.
"Entre 2018 y 2022 Leonardo se ha fijado una tasa anual de crecimiento de las ventas de entre el 5% y el 6%, y del EBITA (beneficio antes de intereses e impuestos) de entre el 8% y el 10%", indican desde JP Morgan. A este respecto, el banco calcula que aproximadamente, "la mitad de las ventas de defensa provienen de mercados en los que el gasto en defensa está aumentando".
Los territorios que más influyen en las cuentas de la compañía, participada por el Estado italiano en un 30,2%, son Europa, de donde procede un 51% de su facturación, y Norteamérica, de donde ingresa un 28% del total. "Los pedidos del Ejército y la Marina de los Estados Unidos impulsarán el crecimiento de los ingresos de las empresas de electrónica y defensa en el cuarto trimestre", indican George Ferguson y Francois Duflot, analistas de la industria de Bloomberg.
Leonardo está viviendo un año para enmarcar. No sólo sube en bolsa más de un 30% desde enero, si no que los analistas creen que sus títulos todavían deben volar más de un 20% para alcanzar su precio justo, en los 12,83 euros.
¿Una fusión a la vista?
A mediados de septiembre Matteo Renzi, ex primer ministro italiano, anunció que abandonada el Partido Demócrata (PD) del que fue secretario general para crear su propia formación. Además de esto, también lanzó la idea de una fusión entre Leonardo y Fincantieri. Esta última se dedica al diseño y construcción de buques mercantes y navales y es propiedad del Estado en un 72%. Según Renzi, mantener divididas a ambas empresas las expondría a una posible adquisición extranjera.
El mercado cree que una fusión entre Leonardo y Fincantieri no tendría sentido
No obstante, no son pocos los ojos que no ven acertada esta propuesta. Para empezar, varios analistas han recalcado que las sinergias entre ambas empresas serían limitadas, ya que la mayoría de los ingresos de Fincantieri procede de los cruceros, mientras que la parte que complementaría a Leonardo, los buques militares, es bastante menor (ambas empresa ya colaboran en este aspecto).
En esta misma línea, Alessandro Profumo, CEO de Leonardo, ya ha dejado claro que "reunir muchas actividades podría convertirse en una limitación", y algunos expertos creen que Leonardo ya está muy diversificada. Una opción sería escindir o vender las actividades civiles de Fincantieri, algo que se considera poco probable.
Por su parte, Giampiero Massolo, presidente de Fincantieri, ha dicho al respecto que "en Italia, así como en Europa, el sector de la industria militar y de defensa tiene necesidad de racionalización para competir con las grandes potencias de este sector extranjero. Dicho esto, no son procesos que se puedan hacer rápidamente".