
Oriente Medio sigue siendo un foco de incertidumbre para los mercados. A las tensiones entre Irán y Arabia Saudí y su aliado estadounidense se le ha sumado un nuevo problema: Turquía prepara una operación militar "inminente", según el presidente turco Recep Tayyip Erdogan, contra las fuerzas kurdas en territorio Sirio, que reclaman su independencia y llevan años peleando contra el gobierno de Ankara con este objetivo.
Estados Unidos parece haber dado la espalda a los que han sido hasta ahora sus aliados en la guerra contra el Estado Islámico, y ha roto su compromiso, primero, con un comunicado oficial de la Casa Blanca, y posteriormente en 140 caracteres: Donald Trump decidió el lunes que la mejor opción para explicar su postura era hacerlo a través de Twitter, publicando un mensaje en el que señaló que "ha llegado el momento de que salgamos de estas ridículas e interminables guerras", explicando que "pelearemos donde vayamos a sacar beneficio, y pelearemos sólo para ganar".
La reacción de los mercados
La decisión del presidente estadounidense tuvo impacto en los mercados que, tras conocer la postura de Trump, parecieron dar por hecho un conflicto militar en la región, y compraron petróleo hasta hacerlo subir más de un 2%, hasta los 59,7 dólares en los que el barril Brent tocó sus máximos diarios. La lira turca fue otro de los activos que recogió la escalada de la tensión, cayendo más de un 1% en todos sus grandes cruces. La divisa del país otomano es, con la excepción del peso argentino, la moneda más bajista del año en los mercados emergentes, con caídas que se enmarcan entre el 1,30% que cede frente al florín húngaro, hasta el 18,06% que pierde contra el rublo ruso, la más alcista del ejercicio en estos países. Frente al euro cede un 5,3%.
La bolsa turca tampoco se libró de las pérdidas: durante la jornada llegó a repuntar más del 1,6%, una subida que se perdió totalmente. El índice de Estambul cerró con una caída del 0,45%.
Estados Unidos habría empezado ya a retirar su contingente militar de la frontera, según publica The Wall Street Journal, para dejar paso a la entrada de las tropas turcas.
Sin embargo, el presidente no tiene todo el apoyo que seguramente desearía en esta cuestión. Según se explica desde Bloomberg, el senador republicano Lindsey Graham criticó la decisión, y la tachó de ser "cortoplacista e irresponsable". Marco Rubio, también en las filas del partido republicano, lo ha calificado como un "grave error que va a tener implicaciones más allá de Siria".
El bono turco lidera las caídas
No sólo la lira y la bolsa de Estambul reaccionaron a los acontecimientos: la deuda turca también. Los bonos con vencimiento a 10 años de Turquía fueron los que más cayeron por precio el lunes en la región EMEA(Europa, Oriente Medio y África) entre los que recoge 'Bloomberg'. La rentabilidad del título en dólares sumó 11,7 puntos básicos, hasta el 6,77%, y los bonos en divisa local subieron 8 puntos básicos en rentabilidad, hasta alcanzar el 13,5%.